El PSOE propone que a los tránsfugas se les prohíba firmar mociones de censura en un año

Un año después de que los partidos firmaran el Acuerdo contra el Transfuguismo, PSOE e IU ven la necesidad imperiosa de reunir su comisión de seguimiento ante los casos de fugas e indisciplinas surgidos en diferentes formaciones tras las elecciones del 13 de junio, y singularmente ante lo que ocurre en Ceuta y Melilla. El PSOE propone reformas legales para "disuadir" a los que tienen tentación de cambiar de grupo. Lo primero es impedir por ley que los tránsfugas voten mociones de censura en el primer año de su abandono del partido que les llevó en su lista.

El PSOE tiene ya perfiladas las líneas generales de una proposición de ley sobre medidas restrictivas para los concejales y diputados que abandonen los grupos políticos en los que se presentaron en las elecciones para pasarse al grupo mixto o a otra formación. De manera simultánea, los socialistas pretenden que se celebre una reunión, en el curso de los quince primeros días de septiembre, para que todos los partidos analicen lo que ha ocurrido tras las elecciones del 13 de junio. Estas iniciativas, tomadas por el responsable de Política Municipal del PSOE, Alfonso Perales, han sido ya aceptadas por su homólogo de Izquierda Unida, Francisco Herrera. Todavía no han respondido el resto de los grupos, pero el PSOE da por seguro que tendrá respuesta al terminar el mes de agosto.Lo cierto es que hay un foro para tratar esta cuestión aunque nunca se haya activado. Hace un año todos los partidos suscribieron el llamado Acuerdo contra el Transfuguismo con la firma del entonces ministro de Administraciones Públicas, Mariano Rajoy, y de representantes del PP, PSOE, IU, CDC, UDC, PNV, CC, IC, BNG, ERC, EA, UV y PAR. Ese acuerdo está plasmado en un documento de once puntos del que los socialistas extraen el número 6 para convertirlo en su iniciativa parlamentaria, aunque sujeta a la discusión del resto de los partidos: "Los partidos políticos firmantes se comprometen a estudiar y, en su caso, presentar una reforma de la Ley Orgánica del Régimen Electoral General que limite los efectos del transfuguismo que pueda provocar la presentación de mociones de censura".

El siguiente párrafo contiene la reforma que se pretende: "La regulación puede incluir la imposibilidad de presentar mociones de censura antes de transcurrido un año desde la toma de posesión de la presidencia de la corporación o durante el último año del mandato".

La propuesta continúa: "Será requisito previo para los concejales que abandonen su grupo de origen, la permanencia, al menos durante un año, en otro grupo político, para que puedan suscribir durante su mandato una moción de censura".

No sólo el PSOE sino que todos los grupos firmaron dentro del acuerdo otro apartado de reforma legal. "Los partidos políticos se comprometen a presentar una iniciativa legislativa de reforma de la Ley Orgánica del Régimen Electoral General, para regular el supuesto de titularidad del cargo cuando el representante electo abandone voluntariamente el partido".

La fecha de la carta, 31 de julio, remitida por Alfonso Perales a los demás partidos indica que antes de que se desataran los casos de transfuguismo en Ceuta y Melilla ya se vio la necesidad de reunir a la Comisión de Seguimiento del Acuerdo ante las indisciplinas que se han dado en diferentes fuerzas políticas. El resultado de esas actitudes ha sido la vulneración de los acuerdos entre partidos para elegir a los alcaldes.

Díscolos de IU en una treintena de municipios han unido sus fuerzas al PP para que el PSOE no se haga con la alcaldía. En otros supuestos, el PP ha dado los votos a IU para que no salga el PSOE. A su vez, la indisciplina de dos socialistas está permitiendo que en Ceuta corra peligro la presidencia del PP y que en Melilla haya salido un gobierno de coalición muy diferente al pactado entre el PSOE y los populares. La característica de todos estos casos es que los militantes han actuado en contra de las directrices de su partido. PSOE e IU se comprometen a expulsar de sus filas a quien haya incurrido en esas actitudes, tal como reconocen Perales y Herrera en nombre de sus formaciones.

"Echar a los delincuentes"

Los dos políticos de izquierda señalan que, además de perseguir modificaciones legales, quieren también el compromiso del PP de que van a tomar medidas disciplinarias con los afiliados que hayan incurrido en estas prácticas. La síntesis de lo que se pretende la expresa Herrera, de Izquierda Unida: "Los tránsfugas son delincuentes y hay que echarles de la política".