Rato denuncia una estrategia del PSOE para consolidar la extrema derecha en España

Los casos de transfuguismo en Ceuta y Melilla, protagonizados por socialistas, no son considerados por el PP como actos de indisciplina aislados, sino que obedecen "a una estrategia" de los socialistas para consolidar en España una fuerza de extrema derecha que perjudique al PP. "Esta estrategia ya la ha intentado otras veces el PSOE", afirmó el vicepresidente segundo del Gobierno, Rodrigo Rato, en Radio Nacional de España. Alfredo Pérez Rubalcaba le replicó que el PP, "por atacar al PSOE, está magnificando al GIL, y eso es jugar con fuego". "La extrema derecha está muy bien cuidada en el PP", añadíó.

Los escándalos de militantes socialistas en Ceuta y Melilla, por cuya actuación el PP podría perder el Gobierno en la primera de ambas ciudades autónomas y no tener la posibilidad de presentar una moción de censura en la otra, suponen para el PP algo más que actuaciones aisladas.Los gestos de consternación expresados personalmente por dirigentes socialistas al PP y singularmente por el responsable de Política Autonómica, Ramón Jáuregui, son escuchados con respeto e incluso con cordialidad justo el tiempo que dura la conversación telefónica entre éste y sus interlocutores populares. A continuación, y ya fuera de la conversación personal, el PP acusa al PSOE de crear una situación de auténtico "escándalo nacional" y de tener a un partido "en descomposición". Las insinuaciones de complicidad entre el PSOE y el GIL siempre han acompañado al resto de las invectivas, pero ayer alcanzaron un relieve mucho más nítido.

El vicepresidente segundo del Gobierno y vicesecretario general del PP, Rodrigo Rato, en declaraciones a RNE, hizo una acusación de gran calado. "Se está tratando de consolidar en España una fuerza de corte de extrema derecha que perjudique al Partido Popular". "Es una estrategia que ya ha intentado otras veces el PSOE", continuó Rato. "También es algo que ha querido poner en marcha el Partido Socialista Francés", añadió.

Las declaraciones de Rato habían sido precedidas por otras de parecido contenido del secretario general del PP, Javier Arenas. El ex ministro se preguntó si los incumplimientos de militantes socialistas "se deben a que algunos dirigentes socialistas están alentando al GIL para perjudicar electoralmente al PP".

Sobre Felipe González

En estas frases no se cita el nombre del ex presidente del Gobierno Felipe González, aunque otros dirigentes del PP sí lo hicieron al aseverar postulados idénticos a los de Arenas. La responsable de Formación del PP, Mercedes de la Merced, y el ministro para las Administraciones Públicas, Ángel Acebes, el día anterior habían señalado como desencadenante de la crisis política de Ceuta y Melilla unas declaraciones del ex presidente contra las alianzas con el PP para cerrar el paso a la formación que lidera Jesús Gil. González mostró en una ocasión su poco entusiasmo por los "pactos anti-Gil", ya que en su opinión lo que los partidos deben hacer es derrotarle en las urnas.Todas estas especulaciones de los populares son rechazadas por la dirección del PSOE que, sin embargo, había preferido no responder hasta que ayer consideró demasiado graves las palabras del vicepresidente Rato. El portavoz Alfredo Pérez Rubalcaba acusó al PP de "magnificar el fenómeno GIL al atacar al PSOE; y eso", advirtió, "es jugar con fuego". "Lo peor de Rodrigo Rato es que miente a sabiendas de que el PSOE no está en ningua operación de ese estilo".

Rubalcaba añadió que el PSOE no sabe nada de la extrema derecha ni se preocupa por ese sector, "que está muy bien cuidado por el PP". "La extrema derecha en España está en el partido del señor Rato y se preocupa de alimentarla para que no se vaya, por ejemplo, nombrando fiscales de ese sector". Además, continuó, "al PSOE le parece muy bien que la extrema derecha siga ahí, con el PP".