"En la actualidad se arriesga más en el cine que en el teatro"
Marta Belaustegui (Madrid, 33 años) se ha curtido en teatro y desde hace siete años está embarcada en su carrera cinematográfica, con títulos como Malena es un nombre de tango, Cuestión de suerte o Cha, cha, cha. Quizá sea éste su año, porque en breve coincidirán cuatro títulos suyos en cartelera. De abuelo vasco, Belaustegui estrena este viernes la comedia Sí, quiero, segunda película de los donostiarras Eneko Olasagasti y Carlos Zabala, que la pasada semana ya llegó a las pantallas de Bilbao, Vitoria, San Sebastián y Pamplona.Pregunta. ¿Qué ha significado para usted hacer una película con dos directores vascos? ¿Ha tenido un componente sentimental?
Respuesta. Siempre me encuentro muy a gusto en estas tierras, probablemente por mi ascendencia. Pero en un sentido profesional ha sido muy agradable trabajar con Eneko Olasagasti y Carlos Zabala, dos personas extraordinarias a las que no conocía. Tienen una manera de trabajar muy parecida a la mía y usamos un lenguaje común.
P. ¿Qué le atrajo de su personaje?
R. Mi personaje está en un momento de su vida en el que no tiene nada claro y todo se le pone difícil. Lo que desea lo tiene delante, pero no lo ve.
P. Ha pasado del teatro al cine, pero en este medio aún no tiene una carrera consolidada.
R. Mi camino en cine ha sido muy poquito a poco, pero ahora tengo varias películas o estrenándose o por estrenar. Esta profesión es muy rara. Todo viene junto. Ahora van a coincidir cuatro películas mías a la vez e imagino que mi nombre se hará más conocido.
P. ¿No tiene la sensación de que siempre hace el papel de la otra?
R. En las siguientes películas ya verán. De todas formas, nunca he tenido esa sensación porque mi carrera de actriz no sólo la miro en cine, sino también en teatro. Creo que he sido una actriz que ha tenido la suerte de hacer cosas muy diferentes. Mi entrada en el cine creo que también está siendo muy variada, abarca drama y comedia y he trabajado con directores dispares. Me siento afortunada.
P. Esta actividad cinematográfica de sus últimos años la habrá apartado del teatro.
R. Sí. Creo además que ahora se arriesga más en cine que en teatro.
P. ¿Por qué?
R. En el cine se está dando la oportunidad de que salgan nuevos actores, nuevos directores, nuevos proyectos, cosa que no ocurre en teatro. Me gusta estar donde hay más riesgo.
P. ¿Cómo ve la situación del cine español?
R. Está en muy buen momento. Hay un abanico muy amplio, con visiones y lecturas muy diferentes, con maneras muy distintas de contar historias. Esto enriquece el panorama cinematográfico. Hay muchos directores ahora con los que apetece trabajar, como Mariano Barroso, Julio Medem o Salvador Ruiz, por poner un ejemplo. P. ¿Qué proyectos tiene?
R. Por ahora, hacer promociones y promociones. Acabo de estar con La rosa de piedra, de Manuel Palacios, y ahora con Sí, quiero. En octubre empezaré una película, pero no puedo contar nada más porque aún no hay nada firmado y me da terror. Y voy a tener mis primeras vacaciones en años ahora, en agosto, algo que necesito horrores.
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