108 usuarios demandan a las compañías aéreas por los retrasos

Dos asociaciones ciudadanas, la OCU (Organización de Consumidores y Usuarios) y la OCUC (Organización de Consumidores y Usuarios de Cataluña), presentaron ayer una demanda civil colectiva de 108 personas contra las compañías aéreas Iberia, Air Europa, Spanair y Thai Airways por los perjuicios que les causaron los retrasos y las cancelaciones de vuelos que se han producido en los últimos meses. La actuación también afecta a 13 agencias de viaje porque son ellas las que deben responder de sus ofertas de viajes combinados: vuelos, alojamientos...Ambas organizaciones presentaron además una reclamación administrativa, previa al recurso contencioso administrativo, contra Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) por "responsabilidad en la gestión y mala situación de los aeropuertos".

La cifra a la que podría ascender la demanda contra las compañías sería de unos 10 millones de pesetas como mínimo, de los cuales cinco corresponderían al importe de los billetes y los otros cinco a otros conceptos, como gastos complementarios -hotel, transporte, llamadas telefónicas...- y pérdidas económicas producidas por la reincorporación con retraso a la actividad laboral.

Según el portavoz de la OCU, José María Múgica, con esta demanda los usuarios han decidido hacer frente de manera definitiva a "la preocupante situación derivada del caos aéreo" debido a que "se encuentran cerradas las puertas a la mediación y el arbitraje por la negativa de los demandados a asumir sus responsabilidades".

Cláusulas abusivas

Asimismo, las organizaciones de consumidores solicitan que se anulen las cláusulas que resulten "abusivas" y en las que las compañías se "amparan para no responder ante los usuarios", indicó, a su vez, el asesor jurídico de la OCU, Juan Carlos Cabañas.Una de las demandantes, Ana María Gutiérrez, calificó su experiencia con el transporte aéreo de "nefasta". El pasado mes de abril, en su viaje a Puerto Rico, donde esperaba pasar unas vacaciones, perdió un total de 27 horas en retrasos. Los dos vuelos de Iberia, el de ida y el de vuelta, fueron cancelados. Tuvo que hacer escalas -su billete era de vuelo directo- y perdió un día de vacaciones y otro de trabajo. "Lo peor fue el trato recibido, ya que la compañía no nos dio ninguna información", concluyó.

Las compañías aéreas evitaron ayer hacer comentarios respecto a la demanda presentada, que aún ha de ser admitida a trámite.

Por su parte, el presidente de AENA, Francisco Cal Pardo, aseguró, en declaraciones a Europa Press, que su departamento atenderá las reclamaciones "debidamente documentadas". Cal explicó que, "normalmente, los pasajeros tienen que presentar las reclamaciones a las compañías y éstas, si lo estiman oportuno" las remiten a AENA.