Noches de ritmos candentes Más de 2.000 personas acudieron a la inauguración del Festival de Jazz de Almuñécar
Más de 2.000 personas presenciaron la noche del pasado lunes el primer concierto de la XXII edición del festival Jazz en la Costa de Almuñécar, en Granada. El trío del pianista italiano Fabio Miano, acompañado por el saxofonista Perico Sambeat y el guitarrista Kurt Rosenwinkel, ofreció casi hora y media de música ecléctica, con dos maneras diferentes de entender el jazz y con un lenguaje atractivo y amable que consiguió la complicidad del público. El primer lleno del festival confirma su consolidación entre los más interesantes del país. Cuenta con un presupuesto de 12 millones de pesetas, muy inferior a los de, por ejemplo, Vitoria y San Sebastián. Sin embargo, sus organizadores, la Diputación Provincial de Granada y el Ayuntamiento de Almuñécar, han sabido elevar el nivel del certamen, supliendo las carencias económicas con otros alicientes que le han dado una impronta y una personalidad propia. Además, la dirección ha conseguido este año la colaboración de una empresa privada granadina que ha aportado un millón y medio de pesetas para su desarrollo. Conciertos gratuitos La gratuidad de los conciertos, las agradables temperaturas nocturnas y el bello marco que rodea el escenario también contribuyen al éxito. La luz del castillo árabe de San Miguel ejerce sobre el público el mismo poder hipnótico que las notas empalagosas y metálicas de un saxo. Y la exuberante vegetación tropical del parque de El Majuelo, unido al aliento del mar, embriaga tanto como los ritmos latinos. A las once menos cuarto comenzó la noche. Sobre el escenario de neón Perico Sambeat, el saxofonista español con más proyección internacional; Kurt Rosenwinkel, una de las figuras más destacables de la nueva generación del jazz americano; y el Fabio Miano Trío, compuesto por el pianista del mismo nombre, el batería Julio Pérez y el contrabajo Dimitri Skidanov. Más que una formación, un encuentro entre dos formas diferentes de concebir el jazz, ya que no suelen trabajar de forma conjunta. Rompió el hielo el trío de Fabio Miano, profesor de la Universidad de Bolonia. El italiano se liberó de las ataduras de su reciente actuación en el Festival de Música y Danza de Granada y empapó a los espectadores con el sonido desinhibido y pausado de su piano. Después entraron en escena Pedro Sambeat y su saxo. El joven intérprete valenciano hizo gala en sus solos de grandes recursos imaginativos, tanto en los momentos trepidantes como en los más melancólicos. El que algunos consideran ya el mejor saxofonista de Europa actuó además de bisagra entre el jazz clásico y ortodoxo de Miano y el sonido contemporáneo y más libre de Kurt Rosenwinkel. El guitarrista de Filadelfia acometió junto a sus improvisados y fugaces compañeros temas de Coltrane (Like sunny), Monk (Trinkle T) y Charlie Parker (Confirmation). Tras los bises, el público, variado y respetuoso, aplaudió sin aspavientos un inicio de festival que los organizadores entienen como arduo para los no iniciados. Ellos mismos esperan que los conciertos de las próximas noches lleguen más a los espectadores. El viernes, por ejemplo, los rimos calientes y latinos de Marc Ribot y los cubanos postizos parecen, en principio, más asequibles. "Jam session" Anoche el certamen continuó con una jam session neoyorkina encabezada por Nicholas Payton y Terell Stafford. Acompañados por ocho músicos de primera fila rindieron homenaje al legendario Norman Granz. Este empresario norteamericano fue el creador de la Jazz at the Philarmonic que, desde 1954, seleccionó todos los años a los mejores intérpretes estadounidenses y los agrupó bajo el nombre de Jam session para realizar giras por Japón, Europa y Estados Unidos. Esta noche está prevista la actuación del panameño Danilo Pérez. Este pianista y compositor une en sus espectáculos diferentes ritmos para conseguir síntesis sorprendentes e innovadoras. Mezcla música latina, clásica, jazz y elementos africanos para conformar un jazz contemporáneo y ecléctico.
