Interior califica de "ilegal y salvaje" la protesta de los trabajadores
El director general de Instituciones Penitenciarias, Ángel Yuste, arremetió ayer contra la radicalización de la huelga de los funcionarios de prisiones por parte de los trabajadores de Puerto 1 y 2, cuya protesta calificó, en consonancia con los sindicatos, de "ilegal y salvaje". "Al no haber hecho la declaración de huelga, no se han podido fijar los servicios mínimos para atender a los internos", dijo. Yuste indicó que la carga policial del sábado, con varios heridos, se produjo cuando los funcionarios intentaron evitar las visitas de los familiares a los presos y que esa actuación de los huelguistas tenía como objetivo que los reclusos se sublevaran. El responsable de prisiones acusó al secretario nacional de Organización del sindicato mayoritario ACAIP, Felipe Saúl, de encabezar una "agitación demagógica que pretende que exista un motín para salir de profeta. Están haciendo todo lo posible para que esto ocurra", añadió. Yuste anunció que se tomarán medidas si los funcionarios no reconducen sus planteamientos a "una situación de legalidad" y persisten en su actitud, "poniendo en grave riesgo la prestación del servicio".
Tras decir que la situación está "absolutamente controlada" y que no hay riesgo de motín, Yuste aseguró -frente a las demandas de los trabajadores- que este año se han incorporado 600 nuevos funcionarios a la plantilla de 18.300 y que la ratio actual es de un funcionario por cada 2,1 presos, lo que permite "prestar razonablemente el servicio".
