Las acusaciones quieren investigar a más personas por el asesinato de la abogada

Las acusaciones personadas en la causa que se sigue por el asesinato de la abogada de Vitoria Begoña Rubio demandaron ayer que se amplíen las investigaciones, ante su sospecha de que Koldo Larrañaga, autor confeso de la muerte de la letrada, pudiese haber actuado por encargo de terceras personas. También piden que se estudie si hubo agresión sexual a la víctima, pese a que no se han encontrado rastros de semen. Los letrados de las acusaciones demandaron al juez la práctica de una treintena de pruebas.

Las tres acusaciones particulares personadas en la causa consideran que existen suficientes indicios como para pensar que Koldo Larrañaga actuó por un móvil económico, que podría estar sujeto al modelo "precio-recompensa", según explicó el fiscal jefe de la Audiencia de Vitoria, Alfonso Aya, después de la comparecencia ante el juez del acusado en presencia del Ministerio Público y los letrados de las partes, la llamada vistilla. De esta manera, las acusaciones particulares piden que se investigue la posible implicación de terceras personas en el crimen y que no se descarte la posibilidad de que la letrada fuese atacada sexualmente. En sus declaraciones iniciales, Larrañaga desmintió ambas cosas. Larrañaga compareció primero en la vistilla ante el juez por la acusación de haber asesinado al empresario de máquinas tragaperras Agustín Ruiz, crimen que el imputado también ha confesado. En este caso, el letrado de la familia, única acusación particular, se limitó a leer el sumario sin llegar a formular una imputación concreta. En la segunda comparecencia, la referida al asesinato de Rubio, las tres acusaciones (la familia de la letrada, el Colegio de Abogados de Álava y la asociación Clara Campoamor, con la que la fallecida trabajaba) mantuvieron una postura conjunta y solicitaron nuevas pruebas y diligencias. Examen psiquiátrico Además de la referida ampliación de la imputación, pidieron que se incorporen a las diligencias las autopsias de los cuatro asesinatos ocurridos en Vitoria en el último año. Los resultados de las mismas aún no han sido remitidos por el Instituto de Toxicología de Madrid. El defensor de Koldo Larrañaga en el caso Rubio solicitó que se practique un examen psiquiátrico al detenido, ante la posibilidad de que presente algún tipo de trastorno psicológico. Según describió uno de los letrados presentes en la comparecencia, el imputado se mantuvo durante la hora y media que duró la vistilla "en silencio, con el ceño fruncido y sin perder ningún detalle" de lo que se decía. El juez leyó el relato de los hechos contenido en los dos sumarios, que detalla cómo se pudieron producir las muertes de Agustín Ruiz y Begoña Rubio. En el caso del empresario de tragaperras, además del homicidio, el escrito destaca que Larrañaga le robó 85.000 pesetas, sumando las cantidades que obtuvo en el domicilio de Ruiz y en la lonja donde se cometió el crimen. Fernando Campo, representante legal de la familia de Agustín Ruiz, señaló que aún no ha decidido qué pruebas solicitará que se practiquen, ya que no ha tenido todavía tiempo de estudiar en profundidad el sumario. Los letrados personados en el caso Rubio destacaron su intención de actuar de manera conjunta e incluso aseguraron que se pondrán en contacto con los abogados que siguen la causa por la muerte del cordelero Acacio Presa, que Larrañaga no ha reconocido haber cometido, por si existiera alguna conexión entre ambos casos. Después de la comparecencia de ayer, el juez instructor cuenta con un plazo de cinco días para aceptar las diligencias que crea convenientes practicar de entre las que han sido demandadas por las partes. El fiscal jefe no quiso precisar anoche de qué pruebas se trataba, aunque según uno de los abogados superan la treintena.