Ciscar impone en las diputaciones a sus seguidores y castiga a las comarcas críticas con la gestora

El secretario de Organización del PSOE, Ciprià Ciscar, a través de su mayoría en la gestora del PSPV, impuso ayer la composición de los grupos socialistas en las diputaciones provinciales. Ciscar ordenó la elección de sus seguidores y castigó a las principales comarcas críticas con la gestora, pese a la resistencia aparente de los asuncionistas que abogaron por la pluralidad interna. El castigo a los críticos se tradujo en el veto a Antonio Mira-Perceval, José Luis Ábalos y Enrique Navarro. La gestora también propuso para su reelección como senadores territoriales a Lerma y García Miralles. La votación de las candidaturas salió adelante por 14 votos a favor, incluidos lermistas, y 4 en contra.

La propuesta de candidatos a las diputaciones provinciales realizada ayer por la gestora acentuó la crisis interna de los socialistas valencianos y castigó especialmente a las comarcas de Valencia, La Vega Baja, La Muntanya y L"Alacantí. La exclusión de Antonio Mira-Perceval, que aspiraba a repetir como portavoz de la Diputación de Alicante, amenaza con traducirse en la rebelión de un buen número de concejales alicantinos, especialmente de la comarca de L"Alacantí, que ya han prestado su firma para avalar candidaturas distintas a las propuestas de la gestora. El debate sobre los criterios provocó en el seno de la gestora una agria discusión entre Mira-Perceval y Adolfo Utor -que sí es propuesto como diputado provincial por La Marina Baixa-. La gestora también vetó a José Luis Ábalos como diputado provincial. Los ciscaristas de la gestora impusieron en el partido judicial de Valencia -que integra la ciudad y las comarcas de L"Horta Sud y L"Horta Nord- la candidatura de cinco de sus partidarios (Almenar, Aguar, Navarro, Ruiz y Andrés Chavarrías), aceptaron la entrada de Consuelo Orias por Valencia e impidieron la entrada de Ábalos cediendo su puesto a Manuel Moret de Nova Esquerra, lo que creará, casi con toda seguridad, un profundo malestar en el nuevo grupo municipal socialista. Nova Esquerra aceptó la oferta tras constatar que la gestora del PSPV le ofrecía representación en la Diputación de Valencia únicamente a través de la ciudad y no de sus comarcas vecinas. En la reunión los ciscaristas apostaron por que las capitales de provincia sólo designasen uno de los dos diputados provinciales y Francisco Ruiz llegó a cuestionar la presencia de las capitales en las diputaciones provinciales. En la comarca de La Plana Baixa, el alcalde de Onda, el romerista Enrique Navarro, también fue vetado, igual que Javier Gomis en Ports-Maestrat. Los asuncionistas intentaron en una discusión matinal con los ciscaristas de la gestora que la propuesta de diputados provinciales recogiese buena parte de la pluralidad del partido. Así, lograron que en algunos de los partidos judiciales, romeristas y lermistas viesen respetadas sus propuestas, como en La Safor-Valldigna (la lermista Josefa Bonet) o La Costera (el romerista Ramón Ortolá). Sin embargo, aunque miembros adscritos al asuncionismo reconocieron que los ciscaristas habían impuesto un criterio "sectario" en las candidaturas, la votación no reflejó ninguna disidencia. Tras la reunión de la gestora, la comisión de listas del PSPV, donde los asuncionistas tienen mayoría, seguía reunida para ratificar las propuestas, pero no se preveían cambios en las candidaturas. En la misma reunión de la gestora se propuso que los senadores territoriales -elegidos por las Cortes Valencianas- Joan Lerma y Antonio García Miralles fuesen nominados candidatos a la reelección. La sorpresa en la cara de algunos de los miembros de la gestora afloró al escuchar los nombres de los suplentes, que en el caso de García Miralles será la lermista de la ciudad de Valencia Carmen del Río y en el caso de Lerma será el ciscarista Enric Luján. También se dio por hecho que Antonio Asunción será el nuevo portavoz parlamentario socialista y que los dos puestos del PSPV en la Mesa de las Cortes serán para el ex portavoz Antonio Moreno y para la vicepresidenta de la gestora, la asuncionista Carmen Ninet. La discusión sobre los criterios utilizados para proponer los aspirantes a diputados provinciales fue tensa y basada en una alambicada argumentación por parte de la gestora, que en unos casos apeló a la decisión de las ejecutivas comarcales, en otros a la cohesión de los grupos municipales y su papel en las corporaciones provinciales, y en otros a la pluralidad.