La expansión de EE UU

La cesión de Luisiana a España levantó protestas entre los colonos franceses. También hubo rechazo en España. Los golillas se opusieron a la aceptación de la colonia francesa. Los golillas eran una facción política del siglo XVIII constituida, en su mayor parte, por funcionarios ilustrados y reformistas procedentes de la nobleza y la burguesía. Finalmente, se impuso el criterio del partido aragonés. Antonio de Ulloa fue nombrado gobernador de Luisiana en mayo de 1765. Ulloa desembarcó en Nueva Orleans el 5 de marzo de 1766. Nada más llegar a Luisiana, Ulloa se enfrentó con el pago de las deudas contraídas por Francia con los colonos. La falta de acuerdo en el pago de las deudas y la obligación de comerciar a través de barcos españoles desembocaron en la insurrección contra las autoridades en 1768. Los rebeldes asaltaron la residencia de Ulloa. O"Reilly sofocó la rebelión en 1769. Los cabecillas de la revuelta fueron condenados a muerte o a reclusión perpetua. Las deudas fueron pagadas por el Gobierno francés con una deducción de las tres quintas partes. Con todo, el problema económico no quedó resuelto. El monopolio comercial español acarreaba la pérdida del mercado francés. Además, los productos de la colonia -tabaco, maderas, añil y pieles- no tenían salida en España. Una medida intentó echar por tierra esta situación nefasta. En 1776, se autorizó el comercio con Francia y las Antillas francesas. La política de expansión de EE UU, que se había independizado en 1776, creó un nuevo problema al exigir el derecho de navegación por el Misisipí. En 1795, España firmó un pacto que concedía a EE UU el derecho de navegación. La situación empeoró en los últimos años de administración española hasta hacerse insostenible. Los problemas económicos fueron agravados por la presión estadounidense. El papel de Godoy "En 1785, llegó Esteban Miró como gobernador. España intentó repoblar Luisiana con malagueños y canarios. España intentó alianzas con los indios frente a EE UU, que les quitaba las tierras. El barón de Carondelet llegó como gobernador de Luisiana en 1791. Hizo una serie de planes de reconstrucción de la colonia", explica una portavoz del Archivo General de Indias. El tratado del barón de Carondelet con la nación Talapuche es un buen ejemplo de esta política. Godoy, primer ministro de España desde 1792, tuvo un papel lamentable a la hora de mantener Luisiana bajo la corona española. "Todos los planes se vieron estrellados por Godoy. Luisiana quemaba en la mano. Godoy cedió Luisiana a Napoleón en 1800", resume la portavoz del Archivo General de Indias. Luisiana fue devuelta a Francia por el segundo tratado de San Ildefonso. Francia vendió Luisiana a EE UU por 80 millones de francos en 1803. EE UU iniciaba así su camino hacia el control del mundo con el dominio del golfo de México y la vía libre para su expansión hacia el oeste.