La Junta de Andalucía respalda que un transexual tutele a una menor

Eva, Alfredo Jiménez en el DNI, será definitivamente la tutora de la hija de su compañero, fallecido en 1997. Los tíos maternos, a través de su abogado, descartaron ayer recurrir ante el Tribunal Supremo la sentencia de la Audiencia de Sevilla, que concede la tutela de la niña de 11 años a Eva, un transexual con el que su padre inició una relación sentimental tras morir la madre de la menor. La Junta de Andalucía respaldó ayer la sentencia, mientras que la Conferencia Episcopal la calificó de "antinatural".

La tutela de la menor había sido concedida, en enero de 1998, a la familia materna por un Juzgado de Primera Instancia, pero la resolución del auto quedó en suspenso hasta que la Sección Sexta de la Audiencia de Sevilla se pronunciara sobre el recurso presentado por Eva, la compañera sentimental del padre de la menor. La sentencia de la Audiencia ha dado finalmente la razón (ver EL PAÍS de ayer) a Eva. La sentencia, que se asegura que la niña considera a Jiménez como "su madre", viene a corroborar el último deseo del padre, que reflejó en su testamento el deseo de que su pareja ejerciera la tutela.

"En estos casos, los retrasos de la Administración de Justicia se entienden aún menos", se lamentó ayer Manuel Portero - abogado de los tíos maternos, que pretendían la tutela-, tras señalar que "este asunto debió resolverse en dos meses, no en dos años". El abogado explicó que la familia materna había decidido no seguir con la vía judicial (podían interponer un recurso de casación ante el Tribunal Supremo), porque "sería un disparate arrancar a la niña de la custodia de una persona ha convivido con ella desde pequeña". Eva y el padre de la menor iniciaron su relación sentimental poco después de que muriera la madre de la niña, hace más de diez años.

Portero recordó además que "posiblemente, el Tribunal Supremo no resolvería el recurso hasta dentro de unos años, cuando la niña ya será mayor de edad". El abogado aseguró que la familia materna había intentado conseguir la tutela de la niña "por una cuestión de responsabilidad frente a la menor". La sentencia de la Audiencia de Sevilla considera, sin embargo, que "la discursión se ha generado por la condición de travestido" de Eva (su abogada, Maria Luisa Mohedas, matizó ayer que su "condición" era transexual).

Sentencia "chocante"

La sentencia de la Audiencia de Sevilla fue considerada "chocante" y "antinatural" por el portavoz de la Conferencia Episcopal Española y obispo auxliar de Toledo, Juan José Asenjo, que afirmó que la decisión judicial "no ayuda" al papel que desempeña la familia en la sociedad. Asenjo advirtió sin embargo que no conocía en profundidad la sentencia, y recordó el punto de vista general de la Iglesia: "El niño necesita el apoyo del padre y de la madre". Ese fue el argumento que esgrimió para resaltar la oposición sistemática ejercida por las autoridades eclesiásticas ante la posibilidad de adopción de menores por parte de parejas homosexuales. "La Iglesia expresa su preocupación e incomodidad respecto a esta sentencia", concluyó el portavoz de la Conferencia Episcopal.

El criterio seguido por la Audiencia de Sevilla es bien distinto al expuesto por el responsable eclesiástico. "El nucleo familiar clásico puede constituir un buen o un mal referente", dice la sentencia, que argumenta que, en este caso, resulta " dudoso" que ese núcleo clásico sea beneficioso para la menor, que por otro lado había desarrollado ya una fuerte relación afectiva con Eva.

La decisión del tribunal fue saludada ayer como "acertada" por el consejero andaluz de Asuntos Sociales, Isaías Pérez-Saldaña, quien aclaró que "el derecho del niño debe estar por encima del derecho a la paternidad o a la maternidad".

El consejero de la Junta de Andalucía explicó a los periodistas que "si la información recogida ha sido suficiente", la Audiencia de Sevilla debía decidir "con quién va a estar mejor el menor, al margen de la situación de libertad sexual o de cualquier otra característica" de la persona que se haga cargo definitivamente de su tutela.