_
_
_
_

Barcelona revisa la trayectoria del escultor Apel.les Fenosa

Conocer la personalidad del escultor Apel.les Fenosa (Barcelona, 1899-1988), a través de 137 obras organizadas en un itinerario temático, es el planteamiento de la exposición que sobre este artista puede visitarse hasta el 22 de agosto en el Museo de Arte Moderno de Barcelona, situado en el parque de la Ciutadella de la ciudad. La primera etapa de la exposición, que celebra el centenario del nacimiento del artista, se titula El universo del escultor. En ella se quiere constatar que en su trayectoria creativa Fenosa fue por libre. Su estilo no se adaptó a las corrientes imperantes, aunque, lógicamente, la tradición clásica y los efluvios de las vanguardias cargaron el ambiente de su creación. Fenosa, del que se presentan 24 dibujos raramente exhibidos, trabajó hasta su muerte, y en su larga carrera tuvo tiempo para evolucionar hacia un trabajo considerado lírico y de gran riqueza interior. Su punto de partida fue el del ambiente noucentista imperante en sus años de formación.

Otras pasiones

En el segundo apartado se refleja la pasión literaria de Fenosa. A su llegada a París en los años 40, el artista buceó en las obras de Rimbaud y Baudelaire donde encontró tema para esculturas como Ofèlia y Àgata. También pueden contemplarse los retratos de varios de sus amigos poetas como Josep Carner y Paul Eluard. El tercer apartado se centra en otra de sus grandes aficiones, la música. La guerra civil española y la II Guerra Mundial afectaron profundamente a Fenosa. Tras la primera se exilió a Francia, donde había residido durante prácticamente toda la década de los veinte. La posterior invasión alemana le hizo huir de París. Este trasiego a causa de los conflictos bélicos le marcó profundamente en lo humano y en lo artístico. La exposición muestra algunas de las piezas que simbolizan su deseo de fraternidad y paz, entre ellas la titulada Paloma y libertad.

La exposición también recoge su interés por la mitología, tema que le entusiasmó, y la relación que mantuvo con Cataluña, especialmente con las tres ciudades más ligadas a su trayectoria: Barcelona, donde nació; Almatret, de donde procedía su familia, y El Vendrell, población en la que a partir de 1958 pasó los veranos y donde, según informó su viuda durante la presentación de la muestra, se habilitará gracias a un acuerdo con la Generalitat un espacio dedicado al artista en la casa veraniega familiar.

Cierra la exposición la sección titulada Las metamorfosis, donde pueden contemplarse figuras femeninas formadas por ramas, conchas marinas, fósiles o nubes, posiblemente sus obras más conocidas. El último apartado tiene una especial significación, ya incluye piezas pertenecientes a la colección de Picasso, que llegó a tener cerca de un centenar de obras de Fenosa.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_