La Rey Juan Carlos acepta, tras una protesta, elevar a cinco las convocatorias para aprobar cada asignatura

Cerca de 300 profesores y alumnos de la Rey Juan Carlos se concentraron ayer frente al rectorado, en el campus de Móstoles, para demandar mejoras en el funcionamiento de la sexta universidad. La movilización, la primera que vive este campus en sus escasos dos años de vida académica, se saldó con avances relevantes. Por lo pronto, el rector, Guillermo Calleja, se comprometió a conceder una quinta convocatoria "de gracia" para superar cada asignatura, frente a las cuatro ahora establecidas. En los demás campus de la región -salvo en la Carlos III-, los estudiantes disponen de seis oportunidades para aprobar cada una de las materias. "Nuestro modelo es paralelo al de la Carlos III", admitió abiertamente Calleja, "y por ello entendemos que para garantizar la calidad y la excelencia académica se le debe exigir al estudiante un esfuerzo adicional respecto a otras universidades". Con todo, el rector de la universidad más joven de la región encontró "razonable" conceder "automáticamente" una quinta oportunidad (la de gracia, en jerga universitaria), así como facilitar que al alumno no le corra convocatoria cuando no se presente a algún examen. "Si el estudiante acredita que anula la convocatoria por causas justificadas, y no por capricho, no encontrará problemas por nuestra parte", enfatizó. Por otro lado, los manifestantes -en su inmensa mayoría, provenientes del centro Ramón Carande, el campus de Vicálvaro- también demandaron la pronta convocatoria del claustro constituyente, el órgano que debe elaborar los estatutos del centro y convocar las primeras elecciones a rector. Los promotores de la protesta se mostraron convencidos de que la Rey Juan Carlos "no alcanzará la mayoría de edad" mientras siga gobernada por una comisión gestora.

En este sentido, Guillermo Calleja reveló que no tiene intención de agotar el periodo de vigencia de la gestora, legitimada a continuar en activo hasta el año 2002. "Sin embargo", matizó el rector, "vería ilógico que se convocara ese claustro mientras el campus de Fuenlabrada no esté a punto, así que no debemos precipitarnos". Las obras de los edificios universitarios fuenlabreños deben arrancar a lo largo de este verano.