_
_
_
_
BALONMANO Mundial de Egipto

Lágrimas entre los internacionales españoles por una "derrota justa"

Leontxo García

Rafael Guijosa, a quien Iñaki Urdangarín define "como un impresionante profesional", tuvo ayer la gallardía de salir de un vestuario saturado de amargura para dar la cara: "Es difícil que volvamos a tener tanta ilusión como en este Mundial. Qué importa ahora que me nombren el mejor extremo del campeonato si no estamos en el podio tras demostrar que éramos uno de los tres mejores equipos, si no el mejor", acertó a decir entre otras frases. Pero en cuanto se apagó la luz de las cámaras rompió a llorar, y el capitán Jaume Fort tuvo que meterle otra vez en el vestuario de la desesperación. De él salió un grito desgarrador: "¡Somos un equipo, España!", lanzado al unísono por varias gargantas. Mientras tanto, Juan de Dios Román procuraba que su amplia experiencia en malos tragos pudiese más que la rabia. "¡Después de muchos días buenos tenemos uno malo. No pasa nada!" se gritaba a sí mismo por los pasillos. Tras invertir unos diez minutos en consolar a Duishebáiev, el seleccionador se puso ante las grabadoras: "Ha quedado claro que el problema básico no estaba en la tara psicológica por haber perdido frente a Rusia en el último segundo, sino en lo estrictamente físico. La derrota ha sido justa porque Yugoslavia ha sabido exprimir al máximo los recursos que le quedaban, y nosotros, no".

Más información
España se cae del podio

Factor psicológico

Pero no descartó del todo el factor psicológico: "Hoy, a la hora de este partido, tendríamos que haber estado calentando para disputar la final contra Suecia. Pero tras perder injustamente la semifinal contra Rusia, había que luchar por el bronce. Lo hemos hecho, pero no hemos podido lograrlo, aunque nos llevamos la mejor clasificación de España en la historia". ¿Por qué no sentó a Urdangarín (un gol de diez intentos) en los últimos minutos? se le preguntó al seleccionador. "Porque no ví una opción mejor, aparte de jugar con dos pivotes. Entrerríos ya había tenido muchas oportunidades, con pocos aciertos y muchos errores. Y Olalla, como todos los demás, estaba muy cansado", agregó.

Juan Antón, uno de sus ayudantes, apuntó en otra dirección: "Conviene recordar que casi todos los jugadores de la selección llegaron aquí con más de setenta u ochenta partidos oficiales en sus piernas. Estar en todas las finales europeas de clubes implica ese precio".

Buenas noticias para quien desee ver el vaso medio lleno: a partir del 2000, los Europeos y Mundiales serán en enero, en lugar de junio. Sin embargo, los jugadores españoles no podrán olvidar que se cayeron de un podio en El Cairo y que estuvieron a un paso de una gran medalla (la de oro) por una cuestión de segundos o de malas interpretación del reglamento.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Leontxo García
Periodista especializado en ajedrez, en EL PAÍS desde 1985. Ha dado conferencias (y formado a más de 30.000 maestros en ajedrez educativo) en 30 países. Autor de 'Ajedrez y ciencia, pasiones mezcladas'. Consejero de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) para ajedrez educativo. Medalla al Mérito Deportivo del Gobierno de España (2011).

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_