Fotos con soneto

JOSU BILBAO FULLAONDO La celebración del quinto centenario de la Universitat de Valencia ha dejado atrás un espléndido recordatorio en el libro Esguards distants (Miradas distantes). Ocho fotógrafos llegados de fuera y el poeta vasco Jon Juaristi son los autores de este trabajo. El profundo ensayo icónico, contrastado en su diversidad creadora, ha sido motivo de inspiración para los poemas. Esta obra colectiva resalta la subjetividad de la mirada, las distintas formas en que los ojos pueden procesar un mismo motivo. El ejemplo se repite para dejar claro que, más allá de las máquinas, lejos de la sofisticación tecnológica, la enciclopedia intelectual de cada realizador juega un papel determinante en el proceso y se convierte en motor que atrae a la mirada del espectador hacia territorios no visibles, palpables exclusivamente por la identificación cultural con el espacio creado. Los temas sobre los que se ha trabajado los artistas han sido las personas, la arquitectura, recintos para el estudio, la investigación, o el deporte, una amalgama de elementos propios del ámbito universitario. Unos bajo forma abstracta y otros con figuración nítida del referente, concluyen un documento que trasciende más allá de las formas y colores que lo suscriben. De Per Barclay (Oslo, 1955) dice Juaristi que "abre en el sueño puertas a otro sueño" y, sin duda, la complejidad aparente de las imágenes que realiza desconcierta. Los reflejos sobre cristaleras interiores, su disección de formas, programan un vector cromático difuso y otro estrictamente geométrico que termina por confluir en una intriga espiritual. Otra faceta que guardan las paredes externas de los edificios la extrae Lynne Cohen (Wisconsin,1944). Espacios anodinos, vacíos de gente, pero repletos de huellas que denuncian vivencias intensas. De los aspectos exteriores se encarga Gabriele Basilico (Milán 1944). No puede escapar de aquellos estudios de arquitectura que le marcaron en su juventud. Sus paisajes universitarios son todo geometría, perspectiva y diseño. Bien sea el colegio mayor Lluis Vives, el Hospital Clínico o el Campus de Burjassot con su empalizada de palmeras, adquieren sensación de vacío, de silencio. Recintos icónicos donde las rígidas estructuras de hormigón transmiten ausencias que inconscientemente reconstruimos sin verlas, una manera de cargar el paisaje con una cálida frialdad. Humberto Rivas (Buenos Aires, 1937) confronta los edificios más antiguos a otros de factura más reciente. De manera abstracta relata el pasado y el presente de claustros y paraninfos. Alberto García Alix (León, 1956) recorre todos los pasillos. Se detiene obsesivo en las salas de disección y embalsamamiento. Finalmente remite a la esperanza viva de una sugerente secretaria de filosofía, donde también insiste, primero en plano medio y, más tarde, en el detalle de ojos y labios. Koldo Chamorro (Vitoria, 1949) con su peculiar impronta y una heterodoxia paradigmática, sin romper su vocación documentalista, se atreve con escenas que parecen escapar de lo académico. Pero, aunque fuera de las aulas todo queda dentro de los límites . La boda se acompaña por la tuna, la habitación de estudiantes no oculta su desorden, la sala de anatomía se llena de momentos macabros y las gafas del soplador de vidrio gritan el reflejo de una llama de soplete que se deja imaginar. Flor Garduño (México, 1957) no olvida quiénes fueron sus maestros y con la dulzura de sus pupilas retrata los personajes. Domina una luz natural que suaviza los rostros y resalta las texturas. Poco importa que sea el rector o Juan, el de mantenimiento. Rotas las distancias, todos en su sitio, con el calor de lo humano. Ian Wallace (1943) recupera en color aspectos y elementos de la actividad cotidiana en la Universidad que los emparenta por parejas sobre un soporte pictórico y así establecer un discurso coherente de gran densidad simbólica. Fotografías con soneto, partitura para una sinfonía artística sin parangón, vertientes combinadas donde la metáfora alcanza su máxima expresión.