El primer ministro indio pide a sus tropas que estén listas para la guerra

La respuesta de India y Pakistán al fracaso de las negociaciones que iniciaron el viernes para poner fin a las hostilidades en la región de Cachemira ha sido la escalada de tensión. Ayer, el primer ministro indio, Atal Bihari Vajpayee, pidió a sus soldados que estén preparados para la guerra, al visitar la región de Cachemira donde el Ejército combate contra cientos de guerrilleros musulmanes. "Queremos paz, pero también debemos estar preparados para la guerra", afirmó Vajpayee en la primera visita a la zona tras el inicio de los ataques aéreos del Ejército de Nueva Delhi contra los rebeldes el día 26. En el mismo momento en el que Vajpayee hablaba a sus soldados, los milicianos islamistas alcanzaban con artillería una aldea situada a dos kilómetros del punto en el que se encontraba el primer ministro. Un oficial indio confirmaba ayer que los combates con la guerrilla se habían recrudecido en las zonas de Batalick y Dras.

Para disminuir la tensión en la línea de control (LOC) que separa ambos países en la región cachemir, Pakistán pidió a India que pusiera fin a los ataques aéreos contra los intrusos. Pero India insistió en que estos son soldados paquistaníes que entraron con un puñado de guerrilleros musulmanes con la intención de alterar la LOC, y descartó detener a la ofensiva.