Detenidos tres cazadores furtivos por abatir cabras hispánicas

Tres cazadores furtivos fueron detenidos el pasado fin de semana por el Servicio de Protección a la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) cuando disparaban a escondidas y al amanecer a un grupo de cabras hispánicas en la sierra de Gredos, en el término municipal de Candeleda (Ávila). Otras dos personas que participaban en la batida ilegal consiguieron escapar de los agentes, a los que dispararon con sus armas provistas de silenciadores.El Instituto Armado imputa a los tres detenidos, de 45, 30 y 46 años, los delitos de tentativa de homicidio, tenencia ilícita de armas y delitos contra la fauna. Los agentes se incautaron de cabezas de cabra hispánica, un rifle sin legalizar con silenciador y tres radiotransmisores que los acusados utilizaban para comunicarse.

La Guardia Civil sospecha que los cazadores actuaban por encargo de coleccionistas que llegan a pagar hasta un millón de pesetas por los cuernos encorvados del mamífero rumiante de la sierra de Gredos y el Pirineo. Los tres detenidos habían trabajado en los pueblos de Ávila y Toledo como guardianes de fincas, según la Guardia Civil. Sólo uno de los tres arrestados había sido detenido con anterioridad por el mismo delito contra la fauna.