El plan para la regeneración de Artxanda se aplaza hasta la próxima legislatura
El plan urbanístico para regenerar el monte Artxanda prevé habilitar más de 110 hectáreas de superficie para uso recreativo y deportivo, con instalaciones como un parque de atracciones, planetario, un casino y un campo de golf. El documento definitivo, ya elaborado, no será debatido por la Diputación de Vizcaya hasta la próxima legislatura, al haberse aplazado su aprobación para lograr un consenso. La inversión prevista asciende a 7.218 millones de pesetas.
La regeneración de Artxanda, el pulmón de Bilbao que palía la carencia de espacios verdes en la ciudad, corre el riesgo de quedarse de nuevo en un boceto, después de que la pasada semana el Consejo de Gobierno foral no abordara la aprobación del plan urbanístico definitivo. Aunque figuraba en el orden del día, este asunto quedó sobre la mesa. La decisión fue tomada por el diputado de Urbanismo Josu Montalbán (PSE-EE) con el fin de lograr un consenso que evite una nueva paralización del proyecto y, con ello, deja en manos del próximo equipo de gobierno de la Diputación el inicio de actuaciones en este área de más de 280 hectáreas de extensión. Los primeros estudios para actuar en este área ya comenzaron en 1982 y en la pasada legislatura un primer proyecto serio se aparcó por la falta de acuerdo entre los dos socios de gobierno en la Diputación, PNV y PSE. En esta legislatura los socialistas, que dirigen el Departamento de Urbanismo, han retomado la iniciativa y en octubre del pasado año se aprobó el avance. Hace un mes concluyó la elaboración del texto definitivo que fija el uso del suelo de Artxanda. El 60% del terreno, alrededor de 170 hectáreas, se dedicará a espacios libres y zonas verdes, con lo que cumple las determinaciones del Plan General de Ordenación Urbana de Bilbao. Los parques, con casi 111 hectáreas, son la principal extensión prevista en el plan elaborado, que incluye también un jardín botánico de ocho hectáreas. Las instalaciones lúdicas y deportivas conforman 110,5 hectáreas, entre las que destacan las 24 hectáreas destinadas a un campo de golf y las 13 para la habilitación de un parque de atracciones, que se unirían a un planetario, casino, dos hoteles y un picadero. El Plan Especial de Artxanda detalla el desarrollo del proyecto en cuatro fases, a lo largo de ocho años. Las actuaciones más prioritarias, que se desarrollarían en los dos primeros años, serían los distintos servicios complementarios y un hotel, a lo que se uniría un adecuado acceso peatonal, un paseo y habilitar un parque. En el último cuatrenio se abordarían los equipamientos deportivos como el campo de golf así como el parque de atracciones y el jardín botánico. Más de 7.000 millones El coste total del proyecto asciende a 7.218 millones de pesetas, de los que más de 1.500 corresponden a las expropiaciones. De las 280 hectáreas de Artxanda, más de 210 son propiedad de Bilbao y poco más de 70 pertenecen al municipio de Sondika, cuyas normas subsidiarias regulan el área de forma más ambigua que en la capital vizcaína. Aparte del consenso que deberá lograrse en la Diputación vizcaína, el desarrollo de la regeneración dependerá en gran parte del Ayuntamiento bilbaíno, donde se ubica la mayor parte de la superficie afectada. El candidato del PNV-EA, Iñaki Azkuna, quien tiene más posibilidades de optar a la alcaldía tras las elecciones, ya se ha manifestado públicamente en contra de la ejecución de planes urbanísticos en Artxanda. "Hay que dejarlo como está", ha asegurado. Según los planes de la Diputación, la regeneracion urbanística tiene un ámbito superior al de Bilbao y persigue atraer a visitantes de otras zonas vizcaínas como las márgenes derecha e izquierda y la comarca del Txorierri.
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