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El PP justifica la línea informativa de RTVE con duras críticas a la etapa socialista

Carlos E. Cué

Y tú más. Con esta frase se podrían resumir todas las intervenciones de los diputados del PP en la comisión de control a RTVE que se celebró ayer en el Congreso. Comparecía el director general, Pío Cabanillas, pero más bien parecía un convidado de piedra. Incluso ofreció marcharse: "Si quieren me voy", visto que lo que allí interesaba no era tanto la gestión de RTVE como el cruce de acusaciones entre los dos grandes partidos, PP y PSOE.La estrategia de los diputados del PP era clara. Criticaban duramente los informativos de RTVE en la época de Felipe González, llegando a exhibir incluso recortes de prensa de 1983. Luego se apresuraban a compararlo con la "imparcialidad y credibilidad" de los informativos actuales, dirigidos por Javier González Ferrari. Además, descalificaban las críticas que vienen haciendo los socialistas hace tiempo y que repitieron ayer. Según el PP, lo único que se pretende conseguir con ellas es presionar a los profesionales para "condicionar la información".

Pero las alusiones a los socialistas eran tan frecuentes que Rosa Conde pidió la palabra para aclarar que la comisión "está pensada para controlar al Gobierno, y no para que el PP controle a la oposición". "¡Ya está bien!", se oía desde los bancos del PSOE.

La estrategia de los socialistas también estaba clara, y no ayudaba mucho a calmar el tenso ambiente, alterado sólo por algunas risas sarcásticas. Habían preparado una batería de preguntas para el director general. Formuladas de manera distinta, todas venían a incidir en la falta de objetividad que sufren, a juicio del PSOE, los informativos de RTVE. Comenzó Joaquín Leguina, que trató de poner algo de humor en el asunto, al preguntar: "¿Ha detectado RTVE algún virus de acción súbita, quizás un virus que produce la invisibilidad, que aqueja a Rosa Díez?".

Los socialistas aseguran que desde que fue nombrada cabeza de lista para las elecciones europeas, Díez ha "desaparecido" de las pantallas de la televisión pública. Cabanillas, que difundió multitud de datos durante toda sus comparecencia, trató de demostrar con ellos que la tesis del PSOE es errónea.

Ferrari, "comisario político"

El director general mantuvo la serenidad, pese al ambiente reinante, hasta que los socialistas comenzaron a comparar la "manipulación" de TVE con la de la televisión serbia, controlada por el régimen de Milosevic. "Es una vergüenza que hagan ese tipo de afirmaciones", exclamó Cabanillas. Mientras, el PSOE llegó a calificar a Ferrari de "comisario político a las órdenes del Gobierno".

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La última pelea se vivió por el funcionamiento del consejo de RTVE, donde la izquierda y el PNV tienen mayoría tras el abandono de varios consejeros del PP. Los populares aseguran que se ha convertido en un órgano "que no representa a nadie" y que está controlado por el comando Rubalcaba, en referencia al portavoz del PSOE y ex ministro.

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