JOSÉ GUILLERMO ZUBIA SECRETARIO GENERAL DE CONFEBASK "Es evidente que la huelga tiene un claro contenido político"

Los empresarios vascos se preparan para la huelga de mañana con el sentimiento de que el paro convocado por las centrales tiene más carácter político que sindical. José Guillermo Zubia (Sevilla, 1946), secretario general de Confebask, cree que la huelga va a aportar poco al empleo. Pregunta. ¿Qué opinión le merece la afirmación de los sindicatos que asegura que después de la huelga la patronal se va a ver obligada acambiar de rumbo? Respuesta. Es una afirmación típica y tópica de situaciones de conflicto el augurar un resultado con independencia de cuál sea la realidad. Evidentemente, sería una irresponsabilidad por nuestra parte que cambiáramos de posición por el hecho de producirse el conflicto. Otra cosa son los márgenes de negociación y análisis que haya. Nosotros seguimos manteniendo que, cualquiera que sea el resultado del conflicto, la ordenación del tiempo de trabajo debe tener un tratamiento en las empresas, y no con acuerdos o imposiciones de tipo general. P. ¿Quiere esto decir que la huelga va a tener unas consecuencias mínimas en la práctica? R. La medida del éxito corresponde a los propios sindicatos, pero no hay que cifrarlo en el seguimiento del conflicto sino en las consecuencias del mismo.Estamos comprometidos en la defensa de la competitidad y del empleo existente. Bajo ese punto de vista, la cuadratura del círculo de reducción de jornada con incremento del empleo y no resentimiento de la competencia empresarial no es algo en absoluto resuelto. P. ¿Cree que va a haber un antes y un después del 21-M? R. Desde luego, el comportamiento que ha habido al respecto no es el más correcto para mantener una relación normalizada. Pero, con todo, las situaciones de conflicto son algo connatural en las relaciones industriales, y bajo ese punto de vista, puede que determinados aspectos puedan verse afectados, pero otros no. P. ¿Pero va a haber dificultades para retomar el diálogo? R. Las dificultades pueden estar desde antes, no por el hecho de la huelga en sí mismo. Tal como se ha producido la convocatoria, al margen del desarrollo de las conversaciones que se llevaban, se ha dado una actitud poco compatible con la buena fe que debe presidir todo el proceso negociador. Y eso es más cuestión de voluntad negociadora que de existencia o no de conflictos. P. ¿Sigue considerando qué la huelga tiene un cierto contenido político? R. Evidentemente, lo tiene y no hay más que remitirse a las declaraciones de los líderes sindicales primeramente convocantes, donde la cuestión que se plantea es de afirmación de espacios sindicales. Y bajo ese punto de vista, tiene un claro contenido político. Lo dijimos y lo seguimos manteniendo: es una convocatoria que no tiene nada que ver ni con el proceso negociador, porque se convocó antes de la firma del Acuerdo por el Empleo, ni con el propio empleo, porque contamos con las mayores tasas de ocupación de la historia. P. ¿Creen que mañana habrá libertad de elección? R. Relativamente. No hay más que ver las declaraciones de los sindicatos sobre los transportes; un sector clave en el que rechazan los servicios mínimos. Se trata de sumar gente a la fuerza a la huelga. Además, como en ocasiones anteriores, funcionarán los famosos piquetes informativos.