La expansión continúa
Algo extraordinario ocurre en Estados Unidos. La economía americana ha crecido a un ritmo del 4% en los últimos tres años sin señales de recalentamiento. Los economistas están obligados a revisar sus teorías, mientras la espiral inflacionista declina a pesar del bajo índice de paro. Debemos preguntarnos si es un fenómeno exclusivamente norteamericano, debido al auge de empresas ligadas a la alta tecnología, o es parte de una tendencia mundial (...)Según los manuales, el escaso desempleo genera una presión alcista de los salarios, pero no sucede así en esta ocasión. Se insinúan todo tipo de teorías: crecimiento de la productividad, Internet, la globalización y, principalmente, el miedo compartido a la subida de precios. Los trabajadores están acostumbrados a la estabilidad y no reclaman subidas de sueldo perturbadoras. Por su parte, los empresarios encuentran que no pueden incrementar los costes tan fácilmente, sobre todo cuando existen bienes importados alternativos (...)
Una explicación optimista es que el mundo regresa al equilibrio, tras décadas de inflación provocada por la escalada alcista de las materias primas. Si es cierto, Europa (...) debería adoptar políticas más expansionistas. (...) Estados Unidos no puede soportar eternamente un crecimiento tan alto. Ya poseen un enorme déficit comercial. Si Wall Street cae se acabaría el derroche que ha sostenido al resto del mundo. Si así sucede, Europa debería ser la siguiente locomotora de la economía. Si no logra aprovechar la ocasión se hundirá con todos.
, 4 de mayo.
