Expropiación vergonzosa

Después de su recorrido por el asentamiento marginal de La Celsa, Cristina Almeida, candidata a la presidencia regional, se dirigió a las viviendas donde crecerá el futuro barrio de Sanchinarro. El gobierno municipal, del PP, defiende que se expropie a los propietarios de esos terrenos del norte de la ciudad para levantar 12.000 viviendas en bloques por un precio irrisorio que no les permitirá comprar un piso barato. Almeida recogió ayer las quejas de unos 40 propietarios que rechazan la expropiación.Los propietarios se mostraban indignados con el precio "ridículo" fijado para la expropiación, según lo calificó el portavoz vecinal, Fernando del Pozo. "El PP nos da una entrada de dos millones y 7.250 pesetas por metro cuadrado expropiado, cantidad ridícula comparada con las 135.000 pesetas por metro cuadrado que se han pagado en la zona de Valdebebas, a escasa distancia de aquí", señaló Del Pozo.

Petra Carvajal, una vecina de 65 años que lleva 30 viviendo en la zona, aseguró ayer: "Aquí estamos dispuestos a todo. De aquí no nos vamos. O nos sacan esposados o con los pies por delante, pero de aquí no nos vamos".

Almeida escuchó las quejas de los vecinos y afirmó que el precio de la expropiación fijado por el PP le parece "una ridiculez comparado con los miles de millones que va a generar la operación urbanística". "Esta expropiación supone un agravio comparativo con respecto al modelo de expropiación de Aravaca para la construcción de la M-40. El PP paga más a los propietarios ricos y menos a los propietarios que viven en una situación mucho menos favorecida", añadió. "El PP demuestra así su nula preocupación por lo social", concluyó.