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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Nombres de animales

Leí, no sin cierto estupor, la manera muy "zoológica" que tiene el Hard Rock Café de dirigir la empresa. En esa noticia, el periódico daba a entender que el tal restaurante madrileno daba nombres de animales a sus empleados de acuerdo a lo que conseguían en la promoción y ventas en tal establecimiento.Por ejemplo, si hay algún empleado que no llega a la cifra presupuestada, le llaman "mono" por aquello de la haraganería atribuida a estos animales. A otros empleados, y por razones parecidas, les denominan de la misma manera. Primeramente, quiero dejar claro que no tengo nada en contra de los animales y, de hecho, ya quisieran ciertas personas comportarse como ellos.

Me cuesta mucho creer que la oficina principal del restaurante, que está en Barcelona, no tuviera ni idea de la forma en que era dirigido su establecimiento de Madrid.

Estas multinacionales lo tienen (y lo quieren) todo bien atado. Siempre tuve la noción de que esta clase de comportamiento profesional era único en la sociedad norteamericana (incluyendo a la canadiense) donde a los trabajadores se les trata como "animales" ( el salario mínimo en la provincia de Alberta es algo así como 500 pesetas/hora, y lo malo es que esto es lo que la gran mayoría gana, sobre todo en restaurantes, donde los camareros dependen de la propina.

En fin, siempre tuve la esperanza de que si una de estas multinacionales abría negocios en España se encontraría con unos sindicatos que los pusieran en su sitio, pero estoy viendo que poco a poco, este "cáncer" se esta introduciendo en todos los países del mundo (en esto, los norteamericanos son maestros), y así nos va.

De todas formas, vi con gran satisfacción como los sindicatos se echaron encima y han tenido que suprimir la práctica de comparar a los empleados con animales.

Mejor es que me olvide de trabajar para este restaurante aquí en Canada, pero ahora que veo como tratan a los empleados prefiero morirme de hambre antes que ser un "animal enjaulado".-

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