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52 de cada 100 vuelos partieron con retraso del aeropuerto de Barajas

Vicente G. Olaya

Embarcar en un avión que despegue a la hora de Barajas no fue ayer una lotería, como ocurrió por ejemplo el miércoles de la semana pasada, cuando el 93% de las aeronaves partió con demora. Y es que la cancelación diaria de vuelos que efectúa Iberia -ayer se suspendieron siete- y un alto en la supuesta huelga de celo que mantienen sus pilotos han convertido despegar a tiempo en sólo un cara y cruz. Ayer, el 52% de los vuelos salió tarde, y el tiempo medio de espera fue de 20 minutos.

Los portavoces del aeropuerto culparon ayer al tráfico aéreo y a "la rotación de las tripulaciones" de los retrasos que afectaron al 52% de los vuelos de Barajas. Según estas fuentes, no existieron otros motivos aparentes para que la mitad de los usuarios del aeródromo tuvieran que soportar un retraso medio de 20 minutos. Pero, no todos los pasajeros tuvieron la misma suerte. Por ejemplo, el avión IBE-3700 a Casablanca (Marruecos) salió con dos horas y 25 minutos de retraso, mientras que el IBE-3944, con destino a Stuttgart (Alemania), tardó en despegar tres horas y 20 minutos más de lo anunciado. Se suspendieron, además, 11 vuelos, de los que siete eran de Iberia.

El PSOE volverá a interpelar el miércoles al ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado, por el colapso del aeródromo. En esta ocasión, el Senado será el escenario elegido por los socialistas para recriminarle por el "caos generalizado" que sufren los aeropuertos españoles. Por su parte, el grupo parlamentario catalán -que la semana pasada bloqueó la reprobación parlamentaria de Arias-Salgado- estudia ahora la posibilidad de pedir su comparecencia en el Congreso, así como la del ministro de Industria, Josep Piqué. El portavoz del Grupo Catalán, Josep López de Lerma, considera que si ambos ministros no solucionan el problema aéreo "deberán presentar su dimisión, porque el Gobierno no puede tirar por la borda tres años de provechosos frutos para el ámbito económico y social por culpa de una mala gestión en los aeropuertos y en Iberia".

Incremento de plantillas

La Unión Sindical de Controladores Aéreos (USCA) cree que la solución a los problemas del tráfico aéreo español pasa por un incremento en las plantillas. Según el presidente de USCA, Juan María García, si este colectivo sólo trabajase las horas establecidas en su convenio, sin efectuar horas extras, no podrían controlarse unos 200.000 vuelos. "A pesar de todo", según indica, "siempre se nos señala con el dedo, y se nos acusa de hacer huelgas de celo". Por su parte, Christos Petrou, portavoz de Eurocontrol, organismo europeo que gestiona el tráfico europeo, recordó a Europa Press que tiene potestad para retirar los permisos de vuelo (slots) que las compañías dejen de utilizar. "Eurocontrol tiene en cuenta cuando no se utilizan los slots adjudicados", señaló Petrou, en clara referencia a que estos permisos deben devolverse cuando no se utilizan. Iberia anunció la semana pasada que renunciaba temporalmente a efectuar 16.000 operaciones con el fin de descongestionar los aeropuertos. El Ministerio de Fomento le prometió que no perdería los slots.

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Sobre la firma

Vicente G. Olaya
Redactor de EL PAÍS especializado en Arqueología, Patrimonio Cultural e Historia. Ha desarrollado su carrera profesional en Antena 3, RNE, Cadena SER, Onda Madrid y EL PAÍS. Es licenciado en Periodismo por la Universidad CEU-San Pablo.

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