Hallado el cadáver del taxista desaparecido en Almería hace nueve días
El cadáver del taxista almeriense José Ruiz Cáceres, de 51 años, fue hallado en la noche del miércoles semienterrado en una finca de Pechina, un municipio de Almería situado a tan sólo 11 kilómetros de la capital. Este taxista, cuya desaparición había sido denunciada tanto por su familia como por sus compañeros de trabajo, fue visto por última vez el pasado día 14, cuando hacia las dos de la madrugada recogió a una pareja en la estación de autobuses de Almería.
Desde entonces no se había sabido nada de él, hasta que pasadas las diez de la noche del miércoles un agricultor que se disponía a regar en la finca donde había sido enterrado el cadáver observó que el brazo de una persona sobresalía de entre la tierra y avisó a la policía y a la Guardia Civil. El cadáver de José Ruiz Cáceres, casado y con tres hijos, fue identificado hacia la una de la madrugada del jueves. La autopsia se le realizó ayer por la mañana y revela que murió a causa de un fuerte golpe en la cabeza. El cuerpo presentaba un alto grado de descomposición y el forense ha certificado que José Ruiz podía llevar muerto entre siete y ocho días. El coche que conducía el fallecido, un Seat Toledo blanco, propiedad del padre del presidente de Tele-Taxi, para quien José Ruiz trabajaba como asalariado desde hacía unos seis meses, fue hallado horas después en la barriada nijareña de Campohermoso, a unos 30 kilómetros de donde se encontró el cadáver. El coche estaba totalmente calcinado. Una de las líneas de investigación se centra precisamente en dos personas que compraron 500 pesetas de gasolina en un bote (el taxi era de gasóleo), con el que presuntamente quemaron el automóvil. Un equipo especializado en retratos-robot intentará descifrar la cara de estas dos personas conforme a los testimonios de los trabajadores de la gasolinera. Fuentes de Tele-Taxi han asegurado que la noche en que desapareció, José Ruiz trató de ponerse en contacto, sin éxito, con la central. "Su número de licencia apareció varias veces en la pantalla, pero no se pudo hablar con él, bien porque estuviera fuera de cobertura o bien porque no lo dejaran", aseguraban ayer algunos de sus compañeros. Todos los taxistas que trabajan en Almería, unos 300, pararon ayer como señal de protesta y solidaridad con el compañero fallecido y sus familiares y mantuvieron una concentración a las puertas del cementerio.
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