El gusto de un coleccionista

Ignacio de Lassaletta, el propietario de las obras de arte precolombino que se exponen en Bilbao, dice que la colección es "fruto de su amor". Lassaletta asegura que mantiene una relación cotidiana con las piezas de los primitivos pobladores de América, que están colocadas a la vista en su domicilio de Barcelona y en la casa de su hijo. "Mi afición por el arte precolombino no proviene de ninguna debilidad: es consciente y racional, y se relaciona estrechamente con mi condición de galerista , de amante del arte y, si se me permite la jactancia, de experto, o de aprendiz de experto", explica el coleccionista. "Mi colección no ha sido fruto del afán acumulativo sino de la búsqueda paciente de las piezas más hermosas y más representativas de cada cultura, de cada época, de cada grupo étnico de los que habitaron hasta hace cinco siglos el continente americano". Lassaletta tiene contacto con otras formas de expresión artística bien diferentes a la arqueología. En su galería de arte exhibe sobre todo la obra de artistas contemporáneos. "Como sucede con el arte africano", señala, "no es difícil establecer vínculos y ligazones entre el arte precolombino y las simplificaciones impresionistas y expresionistas que marcan los inicios de nuestro arte contemporáneo". Para Lassaletta, incluso, su originalidad supera al arte del siglo XX.