Bilbao Ría 2000 licita las primeras parcelas de viviendas de lujo que se construirán en la zona de Abandoibarra

Un día después de la aprobación del plan por parte del Ayuntamiento, la sociedad Bilbao Ría 2000 tomó ayer el primer acuerdo para que el proyecto urbanístico de Abandoibarra se ponga en marcha. El Consejo de Administración de la sociedad interinstitucional sacó a concurso la venta de dos parcelas que albergarán un total de 325 viviendas de lujo, con cuyos ingresos se financiarán parte de las primeras obras que empezarán este verano en este área de 34 hectáreas. Las dos parcelas se encuentran ubicadas, respectivamente, junto a lo que será el hotel de lujo y el actual Museo de Bellas Artes, y totalizan una superficie edificable de 35.500 metros cuadrados. Bilbao Ría 2000 decidió ayer que los compradores de las parcelas tengan que encargar el proyecto de construcción a un arquitecto de prestigio entre una lista de 40 nombres, que incluye a Frank O. Gehry y Norman Foster o a profesionales españoles como Ricardo Bofill, Santiago Calatrava y Rafael Moneo, entre otros. Esta condición, que lleva aparejada la obligatoriedad del elegido de trabajar conjuntamente con un miembro del Colegio de Arquitectos Vasco-Navarro, se ha establecido "con el fin de mantener el carácter emblemático del área de Abandoibarra y estar a la altura, desde el punto de vista arquitectónico, del museo Guggenheim y el Palacio de Congresos". Las viviendas ubicadas junto al futuro hotel serán una de las primeras obras que iniciará este verano el desarrollo de Abandoibarra, si se cumplen las previsiones de la sociedad encargada de revitalizar el área metropolitana. La otra parcela, ubicada al lado del Museo de Bellas Artes, no podrá empezar a construirse hasta que se liberen los contenedores de Renfe, operación fijada para el año 2002. Bilbao Ría 2000 pretende que este año también empiecen a ejecutarse el hotel de lujo, el nuevo parque de Ribera y la pasarela peatonal que unirá Abandoibarra con la Universidad de Deusto. A estas actuaciones se unirá la urbanización de la Avenida del Ferrocarril, la nueva calle que ganará Bilbao con el soterramiento de las vías de Renfe.