IU denuncia ante el fiscal los supuestos destrozos en la villa romana de Barajas

El proyecto del Ministerio de Fomento de enterrar la villa romana descubierta al comenzar las excavaciones de la cuarta pista del aeropuerto de Barajas ha provocado la denuncia del grupo municipal de Izquierda Unida en la capital. Franco González, su portavoz adjunto, llevó ayer el caso ante la Fiscalía de Madrid por el supuesto peligro que corren los restos arqueológicos y que puede implicar un delito contra el patrimonio histórico.

Esta villa romana, similar a un cortijo andaluz actual, vio de nuevo la luz en mayo de 1997, mientras se extraían áridos para las obras de la tercera pista, ahora en funcionamiento.En estos momentos, la Dirección General de Patrimonio de la Comunidad de Madrid estudia los restos y su futuro, incluyendo su traslado, a la espera de que el Ministerio de Fomento comunique la posición exacta de la cuarta pista, cuyo proyecto, a su vez, no está concluido todavía.

"El ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado, habló de enterrar este yacimiento", dijo ayer el portavoz municipal de Izquierda Unida, "y eso no es forma de conservarlo, aunque esté, como dijo, debidamente catalogado".

El ministro afirmó el pasado febrero que la cuarta pista se construiría sobre esta zona. Ayer, ningún portavoz de Fomento confirmó si esta tesis seguía en pie. "Pero también es importante conocer qué daño se ha hecho a los acuíferos y que pague por ello el responsable si lo hubiere", continuó González: "AENA, por permitir la extracción, o el ministerio, por aprovecharlo para las obras del aeropuerto de Barajas". "De hecho, hemos presentado esta denuncia porque nos preocupa tanto el futuro de estos restos históricos como las consecuencias que sobre el acuífero pueda tener la extracción de áridos efectuada sin control alguno", dijo Franco González.

En la denuncia también figura que el concejal se personó el 26 de marzo en la finca El Malecón, según sus palabras, propiedad de Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea, organismo dependiente del Ministerio de Fomento. En esa visita pudo comprobar que varios camiones, en cuyos flancos figuraba el nombre de una empresa de transportes radicada en Coslada, se llevaban arena extraída de esta zona, muy próxima a los márgenes del río Jarama.

"Después llevan los áridos al aeropuerto para compactar las nuevas obras", continuó, "a pesar de que esta empresa no tiene la preceptiva autorización de la Dirección General de Industria, Energía y Minas". Estos hechos pueden implicar sendos delitos contra el medio ambiente y el patrimonio histórico, además de infringir la ley y el reglamento de minas.