Fuerzas serbias asesinan a cinco altos dirigentes kosovares en Pristina

Fehmi Agani, miembro de la delegación kosovar que participó en las negociaciones de Rambouillet y hombre de confianza del líder moderado Ibrahim Rugova, fue asesinado el domingo en Pristina, capital de Kosovo, según David Wilby, portavoz del cuartel general aliado. Junto a él, fueron asesinados otros cuatro dirigentes, entre ellos, el periodista Baton Haxhiu, redactor jefe del diario Koha Ditore. La represión de fuerzas de seguridad serbias o de bandas paramilitares causó, además, la muerte de unos 200 civiles en tres poblaciones de Kosovo arrasadas por las llamas.

Los bombardeos y la acción de las fuerzas serbias han provocado la huida de cientos de miles de kosovares, que han abandonado sus casas y se han dirigido hacia Albania, Macedonia, Montenegro o Bosnia. Según el ministro británico de Exteriores, Robin Cook, varios miles de personas han sido internadas en campos de concentración situados en Prizren y Srbica, en la provincia de Kosovo. Después de seis días de bombardeos aliados, Rusia adoptó ayer la decisión de enviar a Belgrado al primer ministro, Yevgueni Primakov, para "coordinar con Milosevic los pasos que puedan conducir a una solución política", en palabras del ministro ruso de Asuntos Exteriores, Ígor Ivanov, que forma parte de la delegación de representantes civiles y militares que acompaña a Primakov. Por su parte, el Gobierno de Macedonia, preocupado por la extensión del conflicto y las revueltas internas, pide la protección de la OTAN.