La Comunidad instalará teléfonos para sordos en todos sus edificios públicos

Madrid - 23 mar 1999 - 00:00CET

La Consejería de Sanidad y Servicios Sociales ha diseñado un ambicioso plan para mejorar la calidad de vida de las personas discapacitadas. El proyecto, que será aprobado el próximo jueves por el Consejo de Gobierno, incluye desde la compra de miles de autobuses de plataforma baja o la instalación de teléfonos para sordos en todos los edificios públicos hasta diversas ayudas para adecuar las viviendas a las necesidades de los minusválidos. El plan estará dotado con 83.000 millones de pesetas y tendrá una duración de cuatro años.La idea del llamado Plan de Acción de la Comunidad de Madrid para Personas con Discapacidad (en Madrid, el 2,8% de los ciudadanos sufre alguna minusvalía) es convertirse en un documento que agrupe "las decisiones de las diferentes consejerías" y de los diversos organismos públicos con competencias sobre este sector. Para ello propone actuar en cuatro áreas: prevención de deficiencias, asistencia sanitaria, integración de los discapacitados y mejoras en la calidad de vida.

El plan compromete "la instalación de teléfonos de texto en edificios de uso público" de la Comunidad este mismo año. Estos aparatos deben funcionar en todos los ayuntamientos en el 2000, y un año después, en otros edificios públicos que no dependan de la Comunidad.

Tarjeta de estacionamiento

Los minusválidos con coche propio recibirán tarjeta de aparcamiento

Igualmente, se propone "mejorar el sistema de ayudas económicas para la adquisición y adaptación" de los vehículos particulares de los discapacitados y "regular e implantar la tarjeta de estacionamiento para personas con movilidad reducida".El plan se completa con campañas de prevención prenatal para embarazadas de riesgo, campañas de información vial para evitar accidentes y programas de rehabilitación para discapacitados, con especial incidencia en los menores de seis años. En concreto, se proporcionará este año ayuda psicológica a 50 familias de menores con discapacidad, aunque el número aumentará hasta los 275 antes del año 2002. Se crearán 1.000 plazas en centros de día "para dar cobertura a toda la población que lo requiera".

El proyecto apoya los denominados "programas de respiro familiar", a través de estancias de fin de semana para los discapacitados y de vacaciones para los niños con minusvalías. Estos programas serán organizados por ONG con subvención pública.

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Sobre la firma

Vicente G. Olaya

Redactor de EL PAÍS especializado en Arqueología, Patrimonio Cultural e Historia. Ha desarrollado su carrera profesional en Antena 3, RNE, Cadena SER, Onda Madrid y EL PAÍS. Es licenciado en Periodismo por la Universidad CEU-San Pablo.