_
_
_
_
_

El PP andaluz apremiará a Aznar a invertir para compensar la financiación

Luis Barbero

Un respiro en forma de millones. El PP andaluz quiere convencer al Gobierno de José María Aznar de la necesidad de hacer un esfuerzo inversor en Andalucía en los próximos meses, justo cuando las hojas del calendario electoral se aproximan, tanto para los comicios municipales (en junio) como para los autonómicos, aunque esta incógnita aún no está despejada. Los populares pretenden que el dinero que el Ejecutivo central defiende que la comunidad pierde por estar fuera de la financiación autonómica (73.000 millones de pesetas en tres años) llegue a Andalucía mediante inversiones.

El pasado lunes, la presidenta regional del PP y alcaldesa de Cádiz, Teófila Martínez, aseguró que su formación está trabajando para buscar "fórmulas" con el Gobierno central que sirvan para resolver el conflicto de la financiación autonómica. Sus palabras dispararon las hipótesis sobre cuáles eran esas "fórmulas" en las que está trabajando el PP y que Martínez no quiso revelar. En esa línea de trabajo ha puesto manos a la obra la dirección del PP, que está elaborando un "plan concreto de inversiones extraordinarias" para llevárselo próximamente al Gobierno central con el fin de que éste dé el visto bueno. Aunque esta idea está en una "fase muy inicial", reconocen fuentes del PP, el objetivo es tener ultimado cuanto antes los proyectos que podrían beneficiarse de estas inversiones para acelerar la decisión definitiva del Gobierno. El montante global de estas inversiones ascendería aproximadamente a 73.000 millones de pesetas, justo la cantidad que el Ministerio de Economía sostiene que Andalucía ha perdido desde 1996 por rechazar el actual modelo de financiación autonómica, que abarca el quinquenio 1997-2001. El PP cree que de esta manera se podría contrarrestar el discurso del PSOE en el sentido de que Aznar gobierna "de espaldas a Andalucía", y, de paso, serviría para dar un empujón a los intereses electorales de los populares, que en estos tres años se han visto en más de un apuro para defender su posición sobre la financiación autonómica y el no reconocimiento de la población real. Fortalecer el discurso Los populares consideran que de ser aceptada su propuesta se fortalecería su discurso en Andalucía y que podrían defender que pese a que Manuel Chaves "no quiere el dinero de la financiación", esas partidas llegan a la comunidad a través de inversiones finalistas, es decir, a proyectos concretos. Fuentes del PP dicen que algunas obras podrían declararse, incluso, de "interés general" para apresurar el proceso. El principal problema con el que choca esta iniciativa es la "desconfianza", dicen en el PP, que el Gobierno central mantiene hacia la Junta de Andalucía. Una desconfianza que, pese a los numerosos contenciosos que han mantenido ambas administraciones, se fundamenta en dos puntos: el medicamentazo y el pensionazo. La decisión del Ejecutivo andaluz de subvencionar los medicamentos excluidos de la financiación pública y de subir las pensiones no contributivas por encima del IPC ha irritado de forma notable al Gobierno central, que considera que son dos asuntos que deben estar al margen de cualquier disputa partidista y los interpreta como ejemplos de "deslealtad institucional". "Ahora de lo que se trata es de convencer a Rato y a Aznar", confiesa un dirigente del PP.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Sobre la firma

Luis Barbero
Es subdirector de Actualidad de EL PAÍS, donde ha desarrollado toda su carrera profesional. Ha sido delegado en Andalucía, corresponsal en Miami, redactor jefe de Edición y ha tenido puestos de responsabilidad en distintas secciones del periódico.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_