_
_
_
_

El PP pregunta a Molins por un crédito oficial a su hermano

El caso Josep Piqué llevó ayer de nuevo la discordia a la alianza entre el Partido Popular (PP) y Convergència i Unió (CiU). Los convergentes habían asegurado que no entrarían en los negocios del ministro portavoz del Gobierno de José María Aznar. Y así lo hicieron. Pero unas palabras del candidato de CiU a la alcaldía de Barcelona y presidente del Grupo Catalán en el Congreso, Joaquim Molins, afirmando que "sentiría vergüenza de ser diputado del PP" en Cataluña, atizaron las brasas. Y el presidente del Grupo Popular en el Parlamento catalán sacó a relucir que Molins fue un "mal consejero" y reveló que el Instituto Catalán de Finances (ICF) concedió en 1993 un crédito de 120 millones de pesetas y un aval de 80 millones a Escofet, una empresa de la que era consejero Joan Molins, hermano del ex consejero de Política Territorial."Lo más importante es la transparencia y no aprovecharse de los cargos para que se beneficien empresas con familiares de los políticos", afirmó Josep Curto. El presidente del Grupo Popular, que en la anterior legislatura destacó por su labor de fiscalización de los créditos y avales concedidos por el ICF, explicó que el 5 de noviembre de 1993 la Generalitat concedió un aval de 80 millones de pesetas y un crédito de 120 millones a la empresa Escofet 1886, de la que era vocal y consejero Joan Molins Amat, hermano del ex consejero. Curto añadió que la familia Portabella Alós contaba con el 6,60% de las acciones de esta empresa, de la que también era consejero Josep Maria Portabella Alós, que "era y es" en la actualidad interventor general de la Generalitat.

Un mal gestor

Joaquim Molins, que ocupó los departamentos de Comercio, Consumo y Turismo y el de Política Territorial y Obras Públicas, dejó el Gobierno de la Generalitat el 6 de junio de 1993 para pasar a ocupar un escaño en el Congreso. Curto reclamó a Molins que dé explicaciones sobre todos estos asuntos a pesar de que ya no fuera consejero cuando se concedieron el citado crédito y el aval.

Curto respondió de esta forma a las declaraciones que realizó Molins por la mañana afirmando que le daría "vergüenza" ser un diputado del PP por el comportamiento que han tenido en la Cámara catalana, sugiriendo que el voto de castigo ejercido por el Grupo Popular era fruto no de convicciones, sino de instrucciones. "La vergüenza no es ser un político catalán del PP, sino que la vergüenza es ser un mal consejero y un mal gestor público", replicó Curto.

El diputado del PP agregó que Molins "tuvo que dejar la política catalana por su falta de oficio en los debates de política territorial, sobre el trasvase del río Ebro y sobre los vertederos de residuos industriales en la Conca de Barberà, lo que provocó un conflicto social y político de consecuencias irreparables".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_