La empresa hará una planta en China por 26,14 millones de euros

La empresa Babcock & Wilcox ha cerrado un contrato por 29 millones de dólares (4.350 millones de pesetas o 26,14 millones de euros) para la construcción de una planta de incineración de residuos sólidos urbanos con aprovechamiento de energía en Shanghai. "La consecución del contrato refuerza sustancialmente la cartera de pedidos y supone un significativo avance en la consolidación competitiva de la empresa", según señaló la Sepi (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales) en un comunicado. La compañía ha interpretado este contrato como un "positivo cambio de inflexión" en la tendencia de contratación de los últimos meses y, además, "un importante logro en la diversificación de productos". El contrato ha sido adjudicado por China Machiney Import & Export y el ususario final de la planta será Shanghai Environmental Sanitation Administrative Bureau. El proyecto incluye el suministro de los equipos básicos de la planta, además de la coordinación de la parte a contratar por el cliente en China. Babcock & Wilcox Española tiene la responsabilidad del proyecto llave en mano. La planta constará de dos líneas, que pueden ampliarse a tres, quemará 500 toneladas de residuos sólidos al día y generará 24 megawatios de electricidad. Las instalaciones llevarán incorporada una unidad de tratamiento de gases que cumple con la normativa europea. El plazo de entrega es de 38 meses para que la planta esté en funcionamiento comercial. El importe del proyecto es de 29 millones de dólares con financiación mixta de los Fondos de Ayuda al Desarrollo y de la OCDE. La tecnología de la línea de incineración es de Steinmüller y participa también como subcontratista del proyecto la ingeniería Resa. Este contrato ha llegado en un momento en que la cartera de pedidos de Babcock estaba necesitada de un empujón. Actualmente hay pedidos por valor de 41.600 millones.