Múltiples actos de violencia callejera en el País Vasco

No existe tregua para la violencia callejera en el País Vasco. En las últimas horas varios encapuchados incendiaron una caseta de Renfe en San Sebastián; otros levantaron barricadas y prendieron fuego a un puente y a varios contenedores en Navarra; jóvenes con el rostro cubierto atacaron con bates de beisbol una casa del pueblo en Bermeo y otro grupo de violentos lanzó cócteles mólotov contra el juzgado de Durango.En Tafalla (Navarra) ardieron varios contenedores. En Villava, también en la comunidad foral, los saboteadores levantaron una barricada junto al puente que une este localidad con Huarte-Pamplona y le prendieron fuego.

Unos encapuchados vestidos de negro atacaron la casa del pueblo (sede del PSOE ) en Bermeo (Vizcaya) con bates de beisbol y rompieron varios cristales. En el barrio de Ategorrieta de San Sebastián otros encapuchados rociaron la caseta que alberga el cuadro eléctrico del apeadero de Renfe con líquido inflamable. El incendio, que originó una gran humareda y fue extinguido por los bomberos, provocó escasos daños. La sede de los juzgados de Durango (Vizcaya) también resultó dañada después de que unos encapuchados lanzaran cócteles mólotov. Las llamas fueron apagadas por la Ertzaintza.

La policía autonómica detuvo horas antes a un joven que presuntamente participó el viernes en los disturbios del barrio de Santutxu de Bilbao, donde cruzaron vehículos y contenedores.

Por otra parte, el pleno del Ayuntamiento de Ordizia (Guipúzcoa) condenó ayer, con la excepción de HB, el atentado de que fue objeto el día anterior José Manuel Ros, abogado y único concejal socialista en este consistorio. Un artefacto de fabricación casera explotó por la noche en la entrada del despacho de Ros, causando daños en su puerta y en la contigua.