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Arenas da 48 horas al líder del PP en Canarias para que "ponga orden" en la crisis de Tenerife

Javier Casqueiro

En la corrosiva crisis del PP en Canarias van a empezar a rodar cabezas antes de que el partido abra oficialmente una investigación sobre el caso. El secretario general del PP, Javier Arenas, le concedió ayer a José Miguel Bravo de Laguna, presidente del partido en Canarias, 48 horas para que solvente la caótica situación en que vive esta organización tras las denuncias de amenazas, extorsiones y corrupciones de relevantes dirigentes de esta formación. La dirección del PP se ha concedido este plazo para que Francisco de la Barreda, presidente en Tenerife y detonante del conflicto, dimita.

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Arenas recibió ayer en la sede central del PP en Madrid a José Miguel Bravo de Laguna para conocer de primera mano el origen de la crisis del partido en Canarias y en particular en Tenerife. Hoy hará lo mismo con Francisco de la Barreda, quien desató este conflicto al denunciar públicamente que estaba siendo amenazado y presionado por miembros de su partido para elaborar las listas al cabildo y el Ayuntamiento de Tenerife.Fuentes oficiales del PP sólo destacaron tras la cita que Arenas había emplazado a Bravo de Laguna a que impusiese orden en estos dos días. Y subrayaron que Arenas no le indicó al presidente del PP canario si era preciso que destituyese a De la Barreda.

El presidente regional del PP en Canarias, sin embargo, ofreció otra versión del encuentro en la que ese plazo fijado por la dirección del PP afectaba sobre todo a Francisco de la Barreda. "No quiero adelantar el contenido de la reunión que mantuvo Francisco de la Barreda con dirigentes del PP nacional pero está claro que él mismo se ha colocado en una situación difícil de solventar", comentó Bravo de Laguna.

El presidente de los populares canarios salió de la charla convencido de que la dirección nacional le respalda a él: "He recibido el apoyo absoluto de la dirección nacional y esto es muy satisfactorio...". Y concluyó: "Francisco de la Barreda tiene 48 horas para reconducir las cosas". Arenas no le pidió ayer directamente a Bravo de Laguna que destituyese a De la Barreda. Pero la dimisión de éste se espera como consecuencia de sus últimos actos. Ayer, tras la Junta Directiva Nacional del PP, su portavoz oficial, Rafael Hernando, le sentenció antes de que la Comisión de Derechos y Garantías abria una investigación. Lo hará en los próximos días.

El PP, antes de las conclusiones que pueda fijar la comisión, tiene claro que el comportamiento de De la Barreda ha sido "inadecuado" porque, según Hernando, De la Barreda denunció actos de corrupción "hacia fuera" y no en las instancias competentes del PP. Hernando se mostró sorprendido de que reprochase al partido no haber actuado diligentemente ante las agresiones a Julia Bango, abogada del PP. Hernando dijo que De la Barreda debería haber actuado sin esperar al fracaso de su propuesta para encabezar las listas al cabildo de Tenerife.

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Sobre la firma

Javier Casqueiro
Es corresponsal político de EL PAÍS, donde lleva más de 30 años especializado en este tipo de información con distintas responsabilidades. Fue corresponsal diplomático, vivió en Washington y Rabat, se encargó del área Nacional en Cuatro y CNN+. Y en la prehistoria trabajó seis años en La Voz de Galicia. Colabora en tertulias de radio y televisión.

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