Las protestas de secundaria sólo reúnen a 10.000 estudiantes en toda España

El seguimiento de la protesta convocada ayer por el Sindicato de Estudiantes fue el más escaso de los últimos tiempos. Alrededor de 10.000 alumnos, una tercera parte de los que protestaron en noviembre, se manifestaron en 21 ciudades. Piden más recursos para la enseñanza pública y que se haga un informe sobre la situación de los centros. No hubo altercados y las protestas más numerosas ocurrieron en Cataluña, Valencia y Madrid.

Los alumnos achacaron el escaso seguimiento a los exámenes y aseguraron que no será la última convocatoria. "La educación es un derecho, no un negocio", se podía leer en una pegatina que llevaban en el pecho muchos alumnos en la manifestación de Madrid. La convocatoria fue la menos numerosa de los últimos años, aunque los alumnos que acudieron -unos 1.000- eran "los más concienciados", en palabras de Juan Manuel Municio, secretario general del Sindicato de Estudiantes. El seguimiento de la huelga fue de un 80%, según los organizadores, y casi inexistente, según el Ministerio de Educación.La reivindicación principal de los alumnos, más financiación para la enseñanza pública, fue apoyada en los últimos días por casi todos los sindicatos de la enseñanza, la oposición y las asociaciones de padres laicas. No así la protesta en la calle. Los representantes de los alumnos concentrados ayer, el Sindicato de Estudiantes y la Asociación de Estudiantes de Secundaria (AES), han estado reuniéndose con el Gobierno durante las últimas semanas. Los líderes estudiantiles consideran que sus peticiones "no se han traducido en ninguna propuesta concreta por parte de la Administración, que asegura que no tiene recursos", dijo Municio. Sus reivindicaciones se centran en los presupuestos: una inversión suplementaria de un billón de pesetas en cuatro años y la duplicación del número de becas.

Materiales e instalaciones

Los alumnos también piden un informe de la situación de los centros de cada comunidad, de las necesidades de profesorado, material didáctico e instalaciones, "empezando por los institutos en los que se estudia en barracones".Las manifestaciones más numerosas fueron las de Cataluña, convocadas por la Asociación de Jóvenes Estudiantes de Cataluña (AJEC) y el Sindicato de Estudiantes, informa Josep Guitart. La mayor concentración fue la de Barcelona, con unos 3.000 alumnos -1.500 según la Guardia Urbana y 5.000 según los organizadores-. Concluyó frente al palacio de la Generalitat, donde los jóvenes lanzaron huevos, piedras y mandarinas contra la fachada de la sede del Gobierno autonómico. Los alumnos denunciaron que algunos directores les habían impedido hacer asambleas en los centros y criticaron los conciertos a colegios privados "en zonas en las que hay suficiente oferta pública".

En Tarragona, se manifestaron 1.000 personas según la policía, y 3.000 según el SE; en Girona, 500 y 1.000 según los organizadores, y en Lleida, 100 según la policía. Según la Generalitat, la huelga fue seguida por el 33% del alumnado.

En Valencia se congregaron más de 3.000 alumnos en la plaza del Ayuntamiento, informa Neus Caballer. De manera inusual, la Generalitat protestó por "el nivel de crispación de los estudiantes, por el tono de sus protestas y por los lemas insultantes hacia el presidente del Consell , Eduardo Zaplana. En Andalucía el seguimiento de la huelga fue de un 20%, según la consejería, y se manifestaron unos 300 alumnos en varias ciudades, igual que en el País Vasco.