La sociedad pone la informática al servicio del diagnóstico oftalmológico Un negocio con buena vista
EMPRESAS» Disa Infomédica, SLLas aplicaciones médicas de la informática son una veta casi virgen. Explotar ese filón, amén de un buen negocio, supone un avance en el diagnóstico, la asistencia y en el conocimiento científico. Espoleados por estos objetivos, hace unos tres años, Ricardo Roca y Arturo Bustos pusieron manos a la obra. Se instalaron en un despacho que no llegaba a los 40 metros cuadrados y se plantearon el primer desafío: crear un equipo de fotografía digital del ojo, sencillo de manejar por el oftalmólogo y que facilitara el almacenamiento de datos. Cuando llevaban varios meses de trabajo, se les ocurrió presentar el proyecto en el Parque Tecnológico de Málaga. Los primeros pasos que ambos socios habían dado en I+D les abrieron las puertas del PTA. En menos de dos años, Disa Infomédica SL se consolidó como la única empresa andaluza dedicada a poner la informática al servicio del diagnóstico oftalmológico. El año pasado, el balance rondó los 125 millones de pesetas. Estas cifras no son sólo el resultado del trabajo hecho en I+D, sino el producto de la venta de aparatos para ópticas y de instrumental quirúrgico para oftalmología. Roca, quien confiesa que no imaginaba el éxito que han alcanzado en tan poco tiempo y que ahora es compartido por otros tres socios, explica las razones por las que la sociedad se ha abierto hacia la comercialización: "Nuestro departamento de investigación y desarrollo está sustentado en esa red comercial. La empresa no puede estar pendiente de subvenciones". Fiel a su espíritu innovador, Disa no ha dejado de buscar nuevos retos. El segundo proyecto consistió en crear un sistema de fotografía digital para fondos de ojo, que permitiera el diagnóstico inmediato. Hasta ahora, el dictamen médico tardaba unas dos semanas lo que suponía que si en ese tiempo la enfermedad avanzaba, el tratamiento quedaba desfasado. El sistema inventado por esta empresa no sólo posibilita dar una respuesta al momento sino que, al crear un programa de almacenamiento de datos, ordena información muy útil para el seguimiento de los casos, la docencia y la elaboración de estadísticas. Hasta ahora, esos datos se guardaban sólo en la memoria del médico o en cintas de vídeo que resultaban engorrosas de consultar. El equipo evita además tener que repetir la prueba, algo nada desdeñable si se tiene en cuenta que para el fondo de ojo al paciente se le tiene que inyectar una sustancia que suele provocar alergia. El departamento de I+D ya tiene en carpeta otros dos proyectos, uno para desarrollar un sistema de análisis digital de lentes de contacto y otro para ampliar a tres dimensiones el mecanismo de fotografía digitalizada de fondos de ojo. El objetivo es construir herramientas útiles para el oftalmólogo y accesibles al bolsillo de cualquier especialista. "No se puede crear un equipo que valga 20 millones y no lo compre nadie; o que el médico tenga que ser ingeniero informático para manejarlo", resume Roca. Ya hay alguna sociedad interesada en comercializar en el exterior los aparatos inventados por Disa. Por eso, la empresa se ha puesto de cabeza a adaptar los programas informáticos al alemán, el inglés, el francés y el holandés. Los socios se quejan porque vender un producto de alta tecnología con patente española no es fácil. El grupo de marketing que asesora a estos empresarios llegó a recomendarles que comercializaran los equipos como alemanes o ingleses. "Nos negamos", relata José Antonio Velasco con tono tajante. Juan Carlos Vázquez acota: "Nosotros tenemos que hacer un esfuerzo muchísimo mayor que una multinacional que a lo mejor tiene un producto peor, pero lo vende sin problemas. Se presupone que es bueno porque está fabricado en Estados Unidos o en Alemania; sin embargo, cuando vamos a congresos se quedan sorprendidos de lo que hemos creado". Disa no ha echado a andar sola. Ha contado con el apoyo del PTA, del Instituto de Fomento de Andalucía y de un puñado de oftalmólogos que a la par que exponer los problemas que se les presentaban y que han sido el germen de cada proyecto, han contribuido luego al rodaje del producto resultante. Los socios miran hacia adelante y trazan objetivos: consolidar la red de comercialización, reforzar el departamento de I+D y perfeccionar los inventos. Todos se dan por más que satisfechos con los resultados obtenidos porque, a todas luces, han hecho un negocio con buena vista LEONOR GARCÍADirección Parque Tecnológico de Málaga Empleos 11 Facturación 125 millones de pesetas Producción I+D en equipos informáticos para el diagnóstico oftalmológico En apenas dos años, la empresa ha consolidado una red comercial y ha desarrollado un avanzado departamento de I+D
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