Borrell asegura que "Aznar sólo hace lo que el PNV le deja hacer"

El candidato socialista a la Presidencia del Gobierno, José Borrell, aseguró ayer en Pamplona que el Gobierno de José María Aznar está inmerso en una "peligrosa dependencia" en la que "sólo hace aquello que el PNV le permite hacer", y advirtió sobre el riesgo que ello conlleva ante la "lamentable constatación" de que, al mismo tiempo, el nacionalismo democrático "sólo hace o dice aquello que le permite su privilegiada relación con quienes no condenan la violencia o se apoyan en ella". Borrell insistió en la necesidad de que Aznar convoque el Pacto de Madrid.

Aznar, según Borrell, debe convocar el Pacto de Madrid para "renovar" el compromiso constitucional y estatutario en este periodo de tregua terrorista y reafirmar la "unidad" de las fuerzas democráticas para conseguir la "renuncia definitiva a la violencia" del nacionalismo radical. El candidato del PSOE a La Moncloa realizó estas declaraciones en el acto de presentación del secretario general de los socialistas navarros Juan José Lizarbe, como candidato a la Presidencia del Gobierno de Navarra.No olvidó Borrell reiterar la disposición de su partido a "apoyar progresivos acercamientos de presos a cárceles próximas a Euskadi" en consonancia con la declaración del Congreso de los Diputados para una política penitencia "dinámica y flexible" en función del abandono definitivo de las armas y dentro de la validez de la política de reinserción social.

El candidato reiteró que el PP carece de un modelo de país y expresó su convencimiento de que "el debate sobre la identidad" no preocupa a la inmensa mayoría de los españoles. "El proyecto de la derecha tradicional no ha soportado el choque de una situación parlamentaria en la que dependen de los apoyos nacionalistas", aseguró Borrell ante un millar de militantes reunidos en un teatro de la capital navarra.

De igual forma, insistió "sin dramatismos" en que el proyecto nacionalista conduce a la "disgregación" del Estado mediante el desbordamiento del marco constitucional y estatutario "con cuestiones que afectan a la soberanía, a la presencia en Europa y a la constitución de nuevos Estados desde algunas de las comunidades que integran el Estado español".

Por ello, y habiendo constatado que "desde hace meses los demócratas hemos perdido la iniciativa en este terreno", Borrell insistió en que Aznar debe convocar el Pacto de Madrid. Pero mostró su escepticismo en que ello sea posible. "A Aznar no le interesa llevar estos temas a debate porque incomodaría a sus socios del PNV y, por contagio, a CIU", indicó el candidato, quien criticó que "el Parlamento español esté gloriosamente ausente de lo que está ocurriendo" en el proceso de paz.

Borrell denunció la reticencia partidista del Gobierno a dar al conjunto de las fuerzas políticas y a las institucionales nacionales el protagonismo que las leyes y los reglamentos les otorgan, tapándose los ojos mientras en Euskadi se practica lo que calificó de "racismo ideológico incompatible con los valores que defiende el ordenamiento político", se sigue ejerciendo la violencia impunemente, y el Parlamento de Vitoria se convierte "en el centro de la vida política del país e incluso de relaciones internacionales que no le corresponden".

La negativa de Aznar a convocar el Pacto de Madrid o a convocar el "obligatorio" debate anual sobre el Estado de las autonomías, según Borrell se debe a que el presidente "sabe que su partido no soportaría la contradicción que a diario se manifiesta en sus filas sobre los modelos de financiación, los esquemas competenciales o las guindas políticas que hay que poner o no al proceso de paz en Euskadi".