Zedillo llama a la disciplina y a la lealtad dentro del Ejército

Las convocatorias a la lealtad y a la disciplina en las filas de las Fuerzas Armadas, efectuadas por el presidente mexicano, Ernesto Zedillo, y su ministro de Defensa, general Enrique Cervantes, durante dos actos oficiales, parecieron avisos a navegantes, porque se efectuaron tras la insólita protesta de diciembre de 61 militares en activo. En una manifestación, sin precedentes en la historia nacional contemporánea, un jefe del cuerpo médico, ahora en la clandestinidad, encabezó una marcha de oficiales y suboficiales en exigencia de cambios en los códigos de justicia militar y en el régimen interno de los cuarteles.El primer discurso público del general Cervantes, tras la disidencia callejera del 18 de diciembre, fue pronunciado con motivo del 86º aniversario de la Marcha de la Lealtad y en él subrayó que un militar se forja en "una disciplina férrea" y en la lealtad a la patria, a su historia, destino, e instituciones.

Zedillo también exhortó esta semana al cumplimiento del deber "dentro del más estricto marco de la ley" y de la disciplina durante el Día de la Fuerza Aérea, instituida en 1944. Mientras, el teniente coronel médico Hildegardo Bacilio Gómez, que encabezó la singular protesta militar, sigue emitiendo comunicados de su Comando Patriótico de Concientización del Pueblo. Gómez asegura que los 1.500 militares presos por distintas causas apoyan su movimiento, creado por 100 conspiradores, todos ellos sujetos a expediente por faltas. Los cargos son ahora mucho más graves y la Procuraduría General de Justicia Militar puede llegar a pedir hasta 40 años de cárcel por sedición, el supuesto más grave de indisciplina colectiva.