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El SAS exige un convenio para pagar la deuda a la Universidad granadina

El Servicio Andaluz de Salud (SAS) reprochó ayer a la Universidad de Granada haber interrumpido unilateralmente hace dos meses las negociaciones para fijar un marco legal que permita a Salud pagar los 630 millones que adeuda a los profesores con plazas vinculadas a la institución académica. La Consejería de Salud en Granada mostró su malestar por la actitud de la Universidad, "que ha trasladado a la prensa el asunto como si fuera una confrontación y ha amenazado con ir a la justicia".

La manifestaciones de Cano contrastan con la opinión del vicerrector de Fomento de la Universidad, Jesús González, quien sostiene que el pago de la deuda es independiente del convenio que el SAS pretende firmar. Francisco Cano reconoció ayer que el SAS dejó de pagar en diciembre de 1996 los complementos de trabajo asistencial a los profesores de la Universidad granadina empleados en los hospitales. "No sé a cuánto alcanza la deuda con la Universidad, pero hay un montante económico pendiente ya que, desde 1996, el SAS dejó de pagar el complemento de trabajo asistencial, si bien es cierto que los profesores lo han percibido desde entonces a través de la Universidad. No fue una decisión arbitraria. No se podía pagar porque no existía un marco legal para las relaciones entre la Universidad y los diferentes departamentos de la Junta de Andalucía", dijo Cano. Según el delegado de Salud, dicho marco es el mismo que ya regula las relaciones entre su departamento y las Universidades de Córdoba, Sevilla, Jaén, Huelva y Cádiz. "Los convenios son análogos, salvo los matices correspondientes a cada provincia", advirtió. Mejores profesionales Según la versión del SAS, cuando la Universidad abandonó las negociaciones, había acuerdo mayoritario sobre varios puntos. "Deberíamos sentarnos de nuevo, finalizar este convenio para no sólo resolver el problema de la deuda sino abrir las puertas para que la Universidad pueda formar en los hospitales del SAS a los mejores profesionales". Francisco Cano recordó que el SAS, en la situación actual, en la que no existe un convenio que encauce las relaciones entre Salud y la institución académica, podría prohibir la entrada de los estudiantes a los hospitales para hacer prácticas. Sin embargo, esta medida radical no entra en los planes de la Consejería de Salud. La Universidad, por su lado, no ha permanecido inactiva en este conflicto institucional. La semana pasada, el rectorado concedió un plazo de un mes al SAS para que reconozca la deuda de 630 millones de pesetas en concepto de impago del 20% del sueldo de los profesores con plaza en los hospitales públicos de Granada. En caso de que transcurra el mes sin que el SAS asuma el pago de la cifra pendiente, la Universidad ha anunciado que recurrirá a los tribunales de justicia. En la Universidad de Granada existe un centenar de profesores con plaza vinculada. Se trata de docentes permanentes, titulares y catedráticos que deben impartir 6 horas de clase y 3 de tutoría y dedicar otras 25 horas a asistencia sanitaria.

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