Nadal pide al Congreso que niegue su segundo suplicatorio

El alcalde de Tarragona, Joan Miquel Nadal, diputado de Convergència i Unió, solicitó ayer al Congreso que rechace el segundo suplicatorio solicitado por el Tribunal Supremo por los presuntos delitos de tráfico de influencias y prevaricación. Además de utilizar diversos razonamientos jurídicos, Nadal reiteró su convicción de que es víctima de una "persecución inquisitorial" por parte de la fiscal encargada del caso, María José Osuna. El Congreso votará a finales de este mes si retira de nuevo la inmunidad parlamentaria al alcalde. Nadal presentó ayer ante la Comisión del Estatuto del Diputado de la Cámara el pliego de alegaciones correspondiente a este segundo suplicatorio. Esta investigación judicial se refiere a las presuntas facilidades urbanísticas que concedió el alcalde de Tarragona a una promotora inmobiliaria de la cual era accionista su esposa, Julia Abad. El Ayuntamiento autorizó a una urbanización de chalets construida por esa empresa en Els Pallaresos para que se conectase a la red de alcantarillado de Tarragona. Esa autorización fue dada tres años antes de que se aprobase un convenio municipal a tal efecto. En las alegaciones, Nadal niega que su actuación en este caso constituya un delito de tráfico de influencias o de prevaricación, pues afirma que él nunca ha ostentado competencia alguna en materia urbanística. Ello le lleva a afirmar que los hechos descritos por la fiscal Osuna carecen de tipicidad penal, por lo que el procedimiento es, asegura, "injustificado y sin fundamento". El alcalde y diputado acusa a la fiscal de investigar los hechos de forma irregular, colocándole a él en una posición de indefensión jurídica.