El congreso del PP le sirve a CiU para marcar distancias con su aliado en el Gobierno central

Ni giro al centro, ni tímida excursión a los nacionalismos periféricos. El congreso del Partido Popular (PP) ha sido, a juicio de los dirigentes de Convergència i Unió (CiU), un viaje a ninguna parte, aunque para la coalición nacionalista es un regalo de precampaña electoral servido en bandeja, pues le permite hacer visible la distancia con sus aliados del PP. Estos análisis estuvieron ayer sobre la mesa del secretariado permanente de Convergència Democràtica (CDC), el sanedrín del partido nacionalista, que se reunió en el Palau de la Generalitat bajo la presidencia de Jordi Pujol. También fue abordado por el comité de gobierno de Unió Democràtica (UDC). Frases como "España, una, grande e indestructible", pronunciada por Manuel Fraga, son un lastre excesivo para ese autobús que "cada viernes intenta conducir al centro el ministro Josep Piqué", dijo ayer el líder de UDC, Josep Antoni Duran. "La noticia real de ese congreso del PP es la rehabilitación de Vidal-Quadras; no sé si el PP va al centro, pero no deja la derecha", añadió el dirigente democristiano. "La bandera de la España constitucional es tan nuestra como del PP; es más, el precedente del PP, Alianza Popular, dio libertad de voto en el referéndum constitucional, mientras nosotros la votábamos", quiso dejar claro Duran. "Apreciamos su viaje al centro, pero no podemos dejar de expresar que no dejaremos en sus manos la defensa de la España constitucional", concluyó. En línea crítica se expresaron también los dirigentes del Partit dels Socialistes (PSC) e Iniciativa per Catalunya-Verds (IC-V). El primer secretario socialista, Narcís Serra, dijo que si Fraga ha asegurado en el Congreso que siempre ha sido de centro, "no tenían necesidad de marchar hacia donde siempre han estado". El presidente de IC-V, Rafael Ribó, destacó que el PP "cultiva el españolismo más rancio del Santiago y cierra España". El presidente del PP catalán, Alberto Fernández Díaz, respondió a convergentes y socialistas. "CiU", aseguró, "está obsesionada por sus planteamientos nacionalistas" y los socialistas temen las propuestas de Estado de Bienestar que hace el PP. El congreso del PP ha sido el primer argumento político de esta semana en el Parlament. El próximo viernes está prevista la entrada en la Cámara del proyecto de pacto fiscal de CiU.