Hussein regresa a EEUU tras una súbita recaída en su enfermedad
El rey Hussein de Jordania, de 63 años, regresó ayer precipitadamente a la Clínica Mayo de Rochester, en EEUU, tras una grave recaída en su proceso canceroso, dejando el país en manos de su primogénito y recién nombrado sucesor, Abdalá, de 36 años, quien, al mediodía de ayer juró en el palacio real de Ammán, ante los miembros del Gobierno y diversas personalidades políticas y militares del reino, su doble cargo de príncipe heredero y regente de la corona hachemí.La salida del soberano fue anunciada a la prensa por su médico, el doctor Samir Farrage, quien trató de desdramatizar la situación, asegurando que el monarca regresaba a la clínica para "efectuar unas pruebas médicas" después de haber padecido una "subida de fiebre" y un "descenso del sistema inmunitario".