La legionella obliga al Virgen del Rocío a clausurar cuatro plantas durante 18 horas

La aparición de dos casos de legionella en el complejo hospitalario Virgen del Rocío de Sevilla, entre los días 31 de diciembre y el cinco de enero, ha obligado a la dirección de este centro sanitario a poner en marcha un plan de choque para la erradicación de esta bacteria, mediante la hipercloración de la red de agua que abastece las instalaciones afectadas del hospital. El gerente del hospital, Joseba Barroeta, explicó: "No existe ningún riesgo para la salud de los pacientes que han sufrido el contagio -a los que ya se les ha dado de alta- ni para el resto de los enfermos ingresados". No obstante, para evitar la alarma, y siguiendo las recomendaciones que para estas circunstancias establece la Comisión Nacional de Salud Pública, el próximo viernes, a partir de las tres de la tarde, y hasta las nueve de la mañana del sábado, se procederá a la hipercloración del agua entre las plantas primera y cuarta del ala Norte del Hospital General. En total se verán 200 camas afectadas. 30.000 litros de agua Asimismo, se utilizarán más de 30.000 litros de agua hiperclorada (30 partes de cloro por millón) para limpiar las tuberías que, previamente, habrán quedado vacías. Esta operación se repetirá por dos veces. Durante las 18 horas que dure el proceso de desinfección se restringirá el acceso a estas cuatro plantas; también se desocupará el mayor número de camas posible, y se evitarán nuevos ingresos de enfermos en la zona. Barroeta asegura que fue la Unidad de Vigilancia Activa del hospital, creada para prevenir las infecciones hospitalarias, la que detectó los dos casos de Legionella que "es una enfermedad que cuando se coge a tiempo", afirma el gerente, "no supone ningún riesgo para el enfermo infectado". La legionella pneumófila es la más común de las bacterias de este tipo. Apareció por primera vez en 1976 entre veteranos de guerra de EE UU, después de una convención celebrada en Filadelfia. Se propaga por redes de distribución, principalmente a través de los circuitos de refrigeración y de las conducciones de agua. Afecta más a los hombres que a las mujeres, en especial a los de edad avanzada, y es muy raro que se manifieste en los niños. Sus síntomas son los de una neumonía atípica.