El Constitucional italiano acepta un referéndum para decidir la reforma electoral

El Tribunal Constitucional italiano abrió ayer la vía a una profunda reforma del sistema político del país al considerar "admisible" la pregunta del referéndum contra la distribución de escaños por el sistema proporcional presentada hace un año por una agrupación "transversal" de políticos y personalidades decepcionadas por el colapso de la comisión de Reforma Constitucional. Los italianos votarán en una fecha, aún sin determinar, entre el 15 de abril y el 15 de junio."Soy feliz, hoy es San Mario". Esta fue ayer la primera reacción de Mario Segni, veterano político y promotor principal del referéndum que pretende abolir la cuota proporcional del 25% en las elecciones a la Cámara baja del Parlamento italiano. Segni, animador de otros dos referendos electorales, se ha convertido junto al ex magistrado Antonio Di Pietro en la cabeza visible de una iniciativa apoyada por la mayor parte de los partidos grandes, aspirantes a la implantación en Italia de un verdadero sistema bipolar.

La iniciativa fue presentada en febrero pasado, antes de que fracasarán los intentos reformadores de la comisión parlamentaria bicameral que durante siete meses, entre el verano de 1997 y la primavera de 1998, intentó reescribir el título segundo de la Constitución italiana. La insatisfacción del líder de la oposición, Silvio Berlusconi, en la marcha de la reforma de la Justicia hizo que se retirara abruptamente de la comisión provocando su fin. El fallo del Constitucional fue considerado "una buena noticia" por el ex primer ministro Romano Prodi que, en la distancia, había apoyado siempre el referéndum. "Ahora sí que empieza una hermosa batalla", dijo Prodi. La misma satisfacción fue expresada ayer por personajes tan dispares como Achille Occheto, ex secretario general del Partido de los Demócratas de Izquierda (PDS) y uno de los promotores de la iniciativa, y por Gianfranco Fini, líder de la derechista Alianza Nacional. La felicidad de los políticos de las grandes formaciones contrastaba ayer con la preocupación de los líderes de grupos menores, como el de los Verdes o el Comunista.

La aspiración de los 47 firmantes de la consulta es que Italia deje de ser el reino de los partitini. En estos momentos hay más de 45 partidos inscritos en el país, muchos de ellos con posibilidades de llegar al Parlamento gracias a la ley que distribuye por el sistema proporcional el 25% de los escaños de la Cámara, es decir, 155 escaños.