Ofensiva en Lleida para que ACESA aplique los peajes de Tarragona

El Ayuntamiento y la Diputación de Lleida han iniciado una ofensiva conjunta para conseguir que la concesionaria ACESA aplique en los peajes de la autopista A-2 situados entre Lleida y El Vendrell los mismos descuentos aprobados hace unos meses para los usuarios de las provincias de Barcelona y Tarragona. Las dos instituciones también pretenden llegar a un acuerdo con ACESA para que los camiones puedan beneficiarse de peajes blandos mientras duren las obras de la autovía entre Cervera e Igualada. La rebaja de los peajes fue uno de los temas principales que trató el lunes el alcalde de Lleida, el socialista Antoni Siurana, en la entrevista que mantuvo con el consejero de Obras Públicas de la Generalitat, Pere Macías. Siurana reclamó la mediación de la Generalitat para lograr un acuerdo similar al alcanzado recientemente entre el Ministerio de Fomento y ACESA en Tarragona para descongestionar de vehículos pesados la carretera N-II. Siurana considera que si los camiones tuvieran unas tarifas atractivas dejarían de circular por la N-II y utilizarían la autopista. El tramo Cervera-Igualada de la N-II, el único que no es autovía, resulta muy conflictivo por el considerable flujo de vehículos pesados que soporta. "Si se establecieran peajes blandos para los camiones, los vehículos que ahora dejan la A-2 en Soses para enlazar con la N-II a través de la variante de Lleida tendrían la opción de continuar por la autopista", señaló el alcalde de Lleida. Las obras de la autovía están paralizadas judicialmente entre Cervera y Santa María del Camí y nadie sabe cuánto tiempo se tardará en poderlas reanudar. Agravio comparativo Siurana considera un agravio comparativo que los usuarios de Lleida sean los que pagan los peajes más caros de las autopistas del Estado en Cataluña al no haberse podido beneficiar, como los de Tarragona y Barcelona, de la reducción de tarifas aprobada el pasado mes de octubre a cambio de prolongar en cinco años la concesión de la A-2 y la A-7. Actualmente, los leridanos que van a Barcelona por autopista han de pagar dos peajes de 1.145 y 460 pesetas, respectivamente. El primer tramo, entre Lleida y El Vendrell, es el más caro por kilómetro de todas las autopistas estatales en Cataluña. A partir de ahora, las instituciones leridanas -Ayuntamiento, Diputación y Cámara- harán un frente común para negociar con ACESA una reducción del peaje entre Lleida y El Vendrell. Tanto Siurana como el presidente de la Diputación, el convergente Josep Grau, tienen previsto reunirse este mes con responsables de ACESA para presentar una propuesta de pacto similar al que ha permitido que los transportistas de Tarragona se beneficien de un descuento del 66,6% en la autopista entre Salou y El Vendrell mientras duren las obras de las variantes de Torredembarra y Tarragona siempre que realicen un mínimo de ocho trayectos al mes.