Vitoria prepara una plan de vigilancia y sanciones contra la costumbre de no usar los pasos de cebra

El Ayuntamiento de Vitoria planea una campaña de vigilancia especial y sanciones para hacer respetar los pasos de cebra.Las medidas afectarán tanto a los peatones que no utilicen estos pasos como a los automovilistas que no se detengan. El consistorio quiere acabar con ese hábito, muy extendido y llamativo para los visitantes, de obviar la existencia y la función de los pasos de cebra. Los responsables municipales reconocieron el fracaso de las llamadas zonas rojas, donde el importe de las multas de triplica, introducidas como disuasión para el aparcamiento en doble fila.

El concejal de Presidencia, José Echeandía, anunció ayer el futuro plan con el que pretende poner fin a una práctica generalizada en la capital alavesa, que no se repite en otras ciudades del entorno. A su juicio, la utilidad que en las otras capitales vascas y Pamplona tienen los pasos de cebra a efectos de regular el tráfico no se repite en Vitoria. En la ciudad vitoriana, manifestó, "los peatones cruzan la calle por donde quieren y los coches no respeten los pasos porque habitualmente no hay nadie esperando y porque están hartos de conducir sorteando viandantes". El concejal calificó este problema como la auténtica "asignatura pendiente" en materia de tráfico. Sin embargo, la vigilancia y el endurecimiento de sanciones no ha dado hasta el momento buenos resultados. Echeandía admitió ayer el "fracaso cívico" que supuso el último plan de tráfico puesto en marcha por el Ayuntamiento consistente en triplicar las multas, de 5.000 a 15.000 pesetas, a los vehículos que aparquen en doble fila en ocho calles del centro, denominadas vías de atención preferente o zonas rojas. Desde que empezó a aplicarse, en marzo del año pasado, la media de denuncias y multas se ha mantenido en torno a las 700 mensuales. Las calles afectadas son Francia, Olaguíbel, Ortiz de Zárate, Florida, Ramón y Cajal, Manuel Iradier, Gorbea y Sancho el Sabio. Su inclusión en la zona roja se debe a su localización en zonas problemáticas del centro de Vitoria. Más policías en moto A pesar del fracaso, el consistorio insistirá en este plan. Tiene previsto incorporar a su vigilancia en breve a gran parte de los nuevos 24 policías municipales que en los próximos meses comenzarán a desempeñar sus funciones en la ciudad. Los agentes irán en moto para "lograr una mayor agilidad y efectividad en el control del tráfico". Se trata, señaló el concejal del PNV, de forzar un "pulso con todos aquellos ciudadanos que por costumbre se saltan a la torera las normas de tráfico provocando con su actitud atascos y retenciones". Más allá de la responsabilidad de conductores y peatones en los problemas de tráfico que acucian a la capital alavesa, José Echeandía asumió la del propio Ayuntamiento en materia de aparcamientos. Reconoció la insuficiencia de plazas para dar respuesta al parque automovilístico de la ciudad y destacó su intención de crear en breve nuevos estacionamientos.