El Síndic detecta irregularidades en la licitación de 2.161 millones en obras de la Politécnica
El informe de la Sindicatura de Comptes sobre la contratación de obras en las universidades valencianas arroja conclusiones severas respecto a los procedimientos empleados por la Universidad Politécnica. En la fiscalización del ejercicio de 1997, el organismo ha detectado múltiples y variadas irregularidades en la licitación de 2.161 millones en obras, una cifra equivalente al 83,8% del importe total adjudicado por la Politécnica. El Síndic también hace recomendaciones, aunque de menor calado, a la Universidad de Alicante por tres expedientes por 448 millones donde no se justifica el procedimiento negociado o la vía de urgencia utilizada. Sin embargo, no pone objecciones a la Universidad de Valencia, ni a la Jaume I de Castellón.
De los 28 expedientes tramitados por la Politécnica de Valencia en 1997, que ascienden a 2.579 millones, la Sindicatura de Comptes ha detectado irregularidades de diversa consideración en siete expedientes de licitación de 2.161 millones. El informe contiene una extensa lista de incumplimientos administrativos y omisiones que, en ciertos casos, chocan de frente con el espíritu de la Ley de Contratos de las Administraciones Públicas. La Sindicatura destaca en este apartado "la contratación de la elaboración técnica de proyectos, mediante bolsas de trabajo que no contempla la citada ley". En el mismo capítulo de observaciones a las actuaciones administrativas previas a la licitación, el organismo destaca la ausencia del acta de replanteo de la empresa en los proyectos de reforma de la Escuela Universitaria Técnica Industrial (EUTI) y de la Escuela Técnica Superior de Cartografía. La misma falta se detecta en el expediente de la construcción del pabellón polideportivo y de una zona aparcamiento. También hace hincapié en la ausencia de representantes de la Generalitat en la mesa de contrataciones de seis de los siete proyectos auditados. Un requisito que la Sindicatura recuerda: "Está fijado en la cláusula quinta del Plan de Inversiones para 1995-2000", firmado entre el Consell y las cuatro universidades valencianas. En los dos proyectos más caros -el de la construcción del pabellón polideportivo y del aparcamiento (440 millones) y en el de la redacción y ejecución del proyecto para la construcción de laboratorios en la extensión universitaria que la Politécnica tiene en Gandia (596 millones)- el informe sostiene que la universidad contabiliza el reajuste de las anualidades de ambos contratos, "sin que previamente haya tramitado el oportuno expediente presupuestario". Con todo, donde el órgano fiscalizador del Consell hace hincapié de forma más exhaustiva es en el capítulo relativo a "la publicidad y la forma de selección del contratista". Cuatro de los siete expedientes adjudicados se han hecho por el procedimiento negociado sin publicidad, pero el caso más preocupante para la Sindicatura es el de la licitación de los laboratorios de Gandia, donde la ampliación del término de presentación de ofertas se publicó después de haber expirado el plazo inicial. Concertación de intereses "Una medida de este tipo", resalta el informe, "puede plantear problemas desde el punto de vista del principio de igualdad". De manera velada, sugiere que puede haber concertación de intereses en la licitación de algunos de los expedientes. Por ello, recomienda que "se realice un estudio riguroso sobre los criterios de valoración que hayan de regir, en función de las características de cada obra". La Sindicatura pone el dedo en la llaga en el polémico asunto que ha llevado a la Politécnica, incluso, a los tribunales: la presunta competencia desleal de la universidad con los colegios de profesionales, al disfrazar los ingresos por la prestación de servicios a empresas públicas o privadas como ingresos por convenios de I+D.
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