La huelga de Renfe se desarrolla con el cumplimiento de servicios mínimos
El cumplimiento, con carácter generalizado, de los servicios mínimos palió los efectos de la huelga de 24 horas iniciada ayer en Renfe a las 15.00. Eso hizo que la empresa y los sindicatos convocantes -CCOO y CGT- ofrecieran datos discordantes. La compañía asegura que solamente han participado en el paro 332 trabajadores, el 7,6% de los que podían acudir. Las centrales, que calculan sobre los empleados no afectados por servicios mínimos, afirman que la participación llegó al 75%. El conflicto se prolongará hoy hasta las 15.00. La dirección de la compañía ferroviaria informó que el conflicto discurre "con normalidad y sin problemas", tanto en los servicios mínimos decretados por Fomento como en la puntualidad de los trenes que circulan.
Por su parte, CCOO mostró su "satisfacción" por el seguimiento de la huelga, similar al de los paros parciales de diciembre según sus datos, y a pesar de considerar "abusivos" los servicios mínimos.
El diálogo entre este sindicato y la dirección sigue quebrado y CCOO tiene previsto proponer en la próxima reunión del comité general, previsto para el día 12, la convocatoria de movilizaciones alternativas a la huelga, como manifestaciones en las distintas provincias y la celebración de una concentración a principios de febrero en Madrid, pese a que hasta ahora hablaba de promover nuevos paros.
Así lo anunció ayer el secretario general del Sindicato Ferroviario de CCOO, José Manuel López Aira. Este sindicalista aseguró que los 700 millones de pesetas que ha puesto la empresa sobre la mesa para negociar el nuevo sistema de primas, que es una de las reivindicaciones de los sindicatos, junto con la clasificación de categorías, sólo son "una cortina de humo".
Según López Aira, CCOO no exige ninguna cantidad para empezar a negociar, sino garantías de que se discutirá un nuevo sistema de primas más equilibrado, porque "hay compañeros con primas de 20.000 pesetas y otros de 80.000 pesetas, cuando no creo que haya tanta diferencia de productividad". Para UGT, que no apoya esta huelga, el paro es un "sacrificio inútil" para los ferroviarios, según ha manifestado el secretario general de Transportes de UGT, José Javier Cubillo, en declaraciones a Efe TV. Antes de impulsar actos de protesta, UGT pretende "agotar" las posibilidades que ofrece la negociación, y sobre todo cuando la empresa viene mostrando una actitud favorable a dialogar, dice Cubillo.
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