Defensa aprueba a 110 aspirantes a tropa profesional suspendidos por error

El Ministerio de Defensa ha remitido sendas cartas a 110 aspirantes a soldado y marinero profesional que fueron suspendidos en el examen celebrado en octubre pasado, para comunicarles que su eliminación se debió a un error y que tienen superada la prueba. Como estos aspirantes no pudieron continuar el proceso selectivo, ya concluido, se les ofrece la posibilidad de conservar la nota obtenida para la primera convocatoria del año 1999. El error afectó a 227 aspirantes, en torno al 28% de los 800 que se presentaron en Madrid.

El Ministerio de Defensa ha recibido 33 reclamaciones de aspirantes a tropa y marinería profesional que se consideran injustamente suspendidos en el examen celebrado a finales de octubre, dentro de la tercera convocatoria del año, en la que salieron a concurso 4.487 plazas. Dicho examen consistía en una prueba de aptitud, en forma de test, que evaluaba la capacidad verbal y numérica de los opositores. El resultado de este examen resulta fundamental, pues no sólo tiene carácter eliminatorio sino que la nota obtenida determina la especialidad a la que se puede acceder.Los exámenes se corrigen informáticamente, aplicando a cada test una plantilla con las contestaciones correctas al cuestionario planteado. El problema reside en que Defensa no conserva los pliegos de las preguntas que reparte en cada prueba, ya que hay orden de destruirlas inmediatamente, para evitar que se filtren a futuros aspirantes.

Cada examen lleva un número que se corresponde en teoría con una plica de preguntas y es este número el que se introduce en el ordenador para efectuar la corrección. La revisión de los exámenes de los 33 reclamantes, realizada con arreglo a este sistema, confirmó su eliminación.

Sin embargo, el alto número de reclamaciones planteadas hizo pensar que se había producido alguna anomalía y dio lugar a una revisión más profunda. La conclusión fue que estadísticamente resultaba imposible que se hubieran producido tantos suspensos, especialmente en uno de los grupos, en el que casi todos los aspirantes fueron eliminados. Tras aplicar a los test distintos modelos de cuestionarios se dedujo que, debido a un error al grapar los pliegos de respuestas con los de preguntas, la numeración de ambos no se correspondía en 227 casos. Es decir, que se utilizó para corregir los exámenes un cuestionario diferente al que contestaron los aspirantes.

117 suspensos

Aplicando a estos 227 exámenes el pliego de preguntas que mejor se adecuaba a las respuestas de los jóvenes, se concluyó que 110 de ellos debieron superar la prueba mientras que los 117 restantes estaban eliminados en cualquiera de los casos.Varios afectados se pusieron en contacto con EL PAÍS, que se dirigió el pasado día 22 a Defensa para plantearle el problema. Ese mismo día, el Ministerio remitió sendas cartas a 110 aspirantes suspendidos, entre ellos muchos de los 33 que reclamaron, para comunicarles que su eliminación se debió a un error y que se les daba por aprobados. Como el proceso selectivo ya ha concluido y estos opositores no pudieron presentarse a la segunda fase -consistente en la realización de pruebas físicas, un test psicotécnico y un reconocimiento médico-, se les ofrece la posibilidad de presentarse a la primera convocatoria de 1999, prevista para enero o febrero, manteniendo para entonces la nota que tras ahora se les ha adjudicado.

La solución que se ha dado a este error, calificado como "técnico", es la más justa posible, según fuentes de Defensa, aunque plantea algunos problemas. El primero se refiere a la situación de quienes, a pesar del fallo, superaron la prueba, pero con una nota inferior a la que les habría correspondido, lo que ha limitado su posibilidad de acceder al destino militar que deseaban.

Pero el problema de fondo afecta a la idoneidad de la orden de destruir los cuestionarios, que imposibilita la revisión de los exámenes en caso de reclamación. No se puede saber con seguridad qué preguntas contestaron los afectados por el error y sólo se ha determinado por deducción, aplicando módulos estadísticos.