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Reportaje:MEDIO AMBIENTE

La energía eólica, líder entre las renovables

Las inversiones en molinos de viento se han duplicado este año en un salto sin precedentes

Producir energía limpia; apostar por las renovables; frenar la dependencia de las importaciones energéticas, limitar el efecto invernadero... son objetivos a los que es difícil oponerse. Pero en 1996, el último año en el que hay datos confirmados de los Quince, sólo el 5% de la energía total consumida en la Unión Europea respondía a estos criterios ecológicos. La UE defiende duplicar en cada país el peso de las renovables y llegar, en el 2010, a una media del 12% para los Quince. En España, ese porcentaje es del 7% y la fuente con más posibilidades de expansión futura, según los expertos, es la eólica. Este año se han invertido 80.000 millones en plantas eólicas, el doble que en 1997 y más que en todos los años anteriores juntos.

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El ejemplo alemán

Sólo el 7% de la energía consumida en España proviene de fuentes renovables y, entre ellas, la hidráulica y la biomasa ocupan, desde siempre, el lugar predominante. Sin embargo, es la energía eólica la que aglutina el protagonismo de un espectacular crecimiento en los últimos años acompañado de un interés también creciente por parte de empresas y comunidades autónomas.En instalaciones para parques eólicos se han invertido este año casi 80.000 millones de pesetas, el doble que en 1997 y más que en los doce anteriores, es decir, desde que empezaron a levantarse molinos de viento en 1986. Según el Instituto para la Diversificación y Ahorro Energético (IDAE), una sociedad estatal creada en la etapa socialista, hay medio millar de empresas involucradas en este sector, hay tecnologías y zonas geográficas en las estas instalaciones son rentables y hay voluntad de las autonomías para impulsarlas. En cuatro o cinco años, según Luis Iglesias, secretario general de esta sociedad estatal, la eólica puede tener un peso muy relevante entre las renovables y España, que ahora ocupa el quinto lugar entre los Quince en su producción de eólica, podría quedar sólo por detrás de Alemania que genera, para la red eléctrica, 2.000 megavatios anuales.

Los proyectos ya en marcha en Galicia, por ejemplo, la permitirán generar más de mil megavatios anuales dentro de dos años cuando ahora, pese a ser la segunda autonomía con más peso en eólica, sólo produce 107 megavatios al año. Greenpeace asegura que las compañías eléctricas se resistieron en los primeros años al desarrollo de la eólica pero después, "cuando han visto que es un negocio, se han apuntado al carro". El parque eólico de Tarifa, por ejemplo, exigió una inversión de 6.000 millones de pesetas y ahora factura mil millones de pesetas al año. Además, añaden en Greenpeace, "el Gobierno fijó un precio razonable para la eólica cuando se trasvasa a la red, cosa que aún no ha hecho con la solar". Ese precio es de 11 pesetas por kilovatio que se transfiere a la red. Según este grupo ecologista, fijar una prima superior pero también "razonable" es imprescindible para que la solar supere su letargo.

Cayetano Hernández, director de operaciones de IDAE, es menos optimista respecto a las posibilidades de desarrollo de la solar. Defiende la instalación de paneles solares térmicos en las viviendas para sustituir a los termos eléctricos pero asegura que su peso seguirá siendo simbólico. "Lo que no tiene sentido es usar termos eléctricos para calentar el agua en sitios como Canarias donde hay sol".

Grecia es, a mucha distancia, el líder europeo de energía solar térmica y sus condiciones de insolación son muy similares a las de España, ahora por detrás de Alemania y Austria. Para dar ejemplo, o imagen, el Gobierno ha iniciado las obras para instalar en La Moncloa paneles solares térmicos con una potencia de 40 kilovatios que entrarán en funcionamiento el próximo año.

La energía solar fotovoltaica, es decir, los paneles solares para producción de electricidad, tienen ahora un peso estadísticamente nulo entre las renovables y en el IDAE creen que deberán pasar bastantes años para que despegue. Dicen que es muy cara porque la tecnología no está suficientemente desarrollada para hacerla rentable. Greenpeace no está de acuerdo. José Luis García Ortega, experto en renovables de esta organización ecologista, asegura que "si el billón de pesetas que el Gobierno va a donar a las eléctricas se destinara a la solar fotovoltaica tendría un presente y futuro asegurado". Ya sin ironías, este grupo ecologista mantiene que el futuro de la solar fotovoltaica pasa porque el Ejecutivo, como ahora con la energía eólica, fije un precio "razonable" para su trasvaso a la red.

Régimen especial

Industria ha redactado un proyecto de real decreto en el que se fija una prima de 60 pesetas por kilovatio producido en paneles fotovoltaicos que se transfieren a la red frente a las 11 pesetas que ahora se aplica a todas las renovables. Las empresas que fabrican estos paneles confían en que esta nueva norma impulse considerablemente su industria. En el IDAE matizan que, aún con las 60 pesetas, la fotovoltaica seguirá necesitando subvenciones.La biomasa es en España la principal fuente de energía renovable, ligeramente por delante de la producción hidroeléctrica. Sus detractores la resumen en la quema de bosques que, aunque no expulse a la atmósfera más CO2 (dióxido de carbono) que el captado en la fotosíntesis para que crecieran sus árboles, puede atentar contra el medioambiente si esos bosques no se repueblan. La producción energética por biomasa es algo más amplio que incluye, entre otras cosas, el reciclaje de residuos de papeleras -en briquetas de leña, por ejemplo-, la producción de biogás para depurar los vertederos de purín en granjas porcinas o las impopulares incineradoras de los vertederos de basura.

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